Investigando en serio la poesía del Tolima

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Está próximo a aparecer el libro ‘Poesía del Tolima (1905 -1955)’, del poeta e investigador Albeiro Arias, ganador del concurso de Estímulos artísticos y culturales 2013, convocado por la Alcaldía municipal de Ibagué, en la categoría de investigación.

Este trabajo había sido realizado para optar por el título de Magister en Literatura, ofrecido mediante convenio entre la Universidad Tecnológica de Pereira y la Universidad del Tolima.

Su investigación profundiza en este campo, dado que los ejercicios realizados por varios autores se habían limitado a visiones panorámicas que se presentaban en la introducción de antologías, y no profundizaban en un segmento de tiempo y en autores particulares, previo relevamiento bibliográfico, que consistió en recoger todos los libros que publicaron los poetas tolimenses entre 1905 y 1955.

Varios son los aspectos que merecen destacarse. El primero es haber escogido la poesía, con toda su complejidad para ser estudiada en un contexto particular. En segundo lugar, la importancia que tiene para la historia de la literatura de un país, contar con visiones regionales por género y, por último, contar con un enfoque metodológico que asume integralmente el análisis para justificar la selección que se hace de siete autores, como los representativos de ese medio siglo de poesía tolimense.

Sobre los poetas seleccionados no creo que exista duda alguna, cuando en ella figuran autores como Germán Pardo García, un poeta cimero de las letras latinoamericanas y cuya amplísima obra ha sido motivo de estudios en todo el continente. Tal vez en nuestro medio nos hemos quedado repitiendo que este autor, que nació en Ibagué pero que fue llevado a los pocos años a otros lugares hasta que finalmente se radicó en México, fue candidatizado en dos o tres ocasiones al premio Nobel, pero no nos hemos dedicado a leer a profundidad sus textos, que resultan bastante sugerentes en cuanto a su estética y sus contenidos temáticos.

Diego Fallon es otra figura emblemática, por el poema a la luna; Juan Lozano y Lozano también, por su clásico soneto a ‘La catedral de colonia’; Arturo Camacho Ramírez y Óscar Echeverry Mejía son mencionados en el Parnaso colombiano, mientras que la poesía de Jaime Tello se ha redescubierto en los últimos años y se le ha dado el lugar que le corresponde. Finalmente está Martín Pomala, el más conocido en nuestro medio, pero quizá el de menor trascendencia en el contexto nacional.

Resulta grato encontrarnos con un trabajo tan serio como el adelantado por Albeiro Arias, que reivindica no solo a unos artistas, sino que ubica en sus justas proporciones su producción, con el rigor de una investigación académica.

Credito
LIBARDO VARGAS CELEMÍN Profesor Titular UT

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