Breve historia de los cambalaches con la salud de los colombianos

libardo Vargas Celemin

Un proyecto impulsado por Seguros La Equidad que buscaba crear una EPS, con un modelo solidario encarga de los estudios previos a un astuto matemático, quien logra reunir veinte cooperativas e iniciar labores en 1995. Carlos Palacino, nacido en el Líbano se da a la tarea de ampliar el número de afiliados, pero también el distanciamiento de los propósitos iniciales, hasta construir la más grande EPS del país, con el apoyo de importantes asesores que, logran acabar con el Instituto de Seguros Sociales, previo proceso de descrédito impulsado por las mismas autoridades.

Saludcoop llega a la cifra de cinco millones de afiliados y con la anuencia de las entidades de control como la Superintendencia de Salud, se dedica a otras actividades que nada tienen que ver con la prestación de los servicios de salud. La EPS dirigida por Carlos Palacino se consolida con nuevas empresas que aparecen como independientes de Saludcoop, pero con directivos y tareas que las ligan a la entidad, como es el caso de Cafesalud y Esimed S.A.

Sin embargo, pronto se descubren las actuaciones de Palacino, comienza a erosionar su imperio, pero este sigue maniobrando a través de la dirección de Cafesalud, empresa que reemplaza a Saludcoop. Como se esperaba, esta entidad no puede cumplir con las obligaciones adquiridas y es vendida en el 2017, a un grupo de IPS que, bajo el nombre de Medimás inicia labores en agosto de 2017.

La nueva empresa entra en crisis muy pronto, en diciembre de 2017 es sancionada por “serios incumplimientos en la conformación y el correcto seguimiento a su red de prestadores” y se le aplica una sanción de mil millones de pesos. En octubre de 2018 es revocada la venta de Cafesalud a Medimás, por incumplimiento de obligaciones económicas y en su modelo de atención integral.

Dos meses antes se han cerrado ocho clínicas, entre ellas la de Ibagué lo cual genera una grave crisis y la EPS es puesta a la venta de nuevo.

Pronto, aparece “La Dynamic Busines and Medical Solutions” con experiencia en los Estados Unidos y una serie de promesas, como lo hicieran los proponentes anteriores. El senador Robledo y otras personas denunciaron la precariedad de la empresa en Colombia y una respuesta de la misma el pasado 18, trata de aclarar su situación.

De lo que sí estamos seguros es que “vuelve y juega”, mientras muchos colombianos mueren sin atención oportuna y miles de personas hacen inmensas colas esperando una cita, una autorización para un procedimiento, una consulta con el especialista o los medicamentos que siempre escasean, pues la cambalachera élite del poder está convencida que puede jugar con la salud del pueblo, porque este no se defiende.

lcelemin2@gmail.com

Comentarios