Nada nuevo

Polidoro Villa Hernández

Enero resulta entretenido porque cada quién, a su manera, especula sobre probables sucesos del futuro cercano y lejano de este dócil pueblo. Por ejemplo: un locuaz ascensorista, -que en lugar de sus pregonados cálculos renales parece que tuviera Runas vikingas-, profetiza preocupado: “Sépalo, ‘mi veci’, todo va a subir, ¡inclusive la gasolina! Y también, ‘subirá’ Vargas Lleritas a la presidencia”, remata sonriente. Prueba fehaciente que en este reino poseemos el don sobrenatural de saber quién será el nuevo mandatario con años de antelación y exhibimos una dignidad menguada que aguanta rudos coscorrones económicos y políticos sin mucha protesta.

Es innegable que esta es una tierra para gente iluminada, miren si no los bien pagados lobistas de Odebrecht y Reficar. Al escéptico pueblo raso, siempre esquilmado con engañosos discursos y prédicas en oportunistas y metalizados mensajes divinos o políticos, solo le quedan culebreros y chamanes de $10.000, para adivinar su incierto futuro e invocar mejor suerte.

Y parecen efectivos. En la carrera tercera entre calles doce y quince, crece la oferta de síquicos, brujos y astrólogos, con tan excelsas especialidades que muchos de ellos deberían estar en el próximo gobierno para solucionar males crónicos y corregir el zigzagueante rumbo del país. El Hermano Samuel ofrece: “Trabajos a larga distancia. Transmito buena onda” ¿Potencial MinTic?; Abdel y Alina: “Rezamos fincas, animales, cultivos”. ¿Ministros de Agricultura y Ganadería?; Indio Vanoy: “Saco tesoros ocultos (¿de paraísos fiscales?), guacas (¿de las Farc?), rescato deudas perdidas (¿multas a condenados por peculado?).” Sería un eficaz Ministro de Hacienda.

Khalid, El Guardián del Cielo: “Curo maleficios, enfermedades desconocidas, impotencia (¿incluída la institucional para luchar contra las codiciosas farmaceúticas?). Fijo Ministro de Salud; El Chamán del Amazonas: “Atraigo, doblego, amanso, retiro enemigos y rivales. Pactos diabólicos”. En época electoral, ideal como Ministro del Interior; Zarusza: “Invoco en su presencia a sus queridos familiares muertos.” Sería la nueva directora de Medicina Legal. A diferencia de muchos ‘dirigentes’, todos garantizan resultados. ¡Hay tanto talento oculto en este país de la casta champeta!

Aquí, es fácil hacer pronósticos porque nada cambia. Lo impiden los que se eternizan en el poder con los mismos añejos resabios. No le crean a las ‘nuevas’ viejas caras que prometen: “Ahora sí le inyectaremos sangre joven a la democracia.” Más hemoglobina fresca exhiben los sesentones ciclistas que madrugan a Pastales y reponen allí sus fuerzas con un abundante caldo de ‘claros’ con arepa caliente.

Lo seguro en este nuevo año: habrá muchos accidentes con víctimas, ocasionados por una “falla mecánica”, nombre que se le da a la irresponsable ‘guerra del centavo’; oiremos sirenas de ambulancias que llevan un niño que va tarde al colegio; muchos cínicos corruptos alegarán “persecuciones políticas”. Y sufriremos cada partido de Colombia en Rusia.

Comentarios