Luego de varios días de haber sido emitida una orden de captura en su contra, y una circular de Interpol, finalmente se entregó voluntariamente a las autoridades, el exgerente del Imdri, Carlos Heberto Ángel.
El exfuncionario del gobierno de Luis H. Rodríguez, compareció ante un juez por los delitos de peculado por apropiación, celebración indebida de contratos sin requisitos legales, e interés indebido de contratos. Lo anterior con relación al desfalco de los Juegos Nacionales. De las tres acusaciones, solamente aceptó la primera.
Se supo durante la audiencia de legalización de captura, que en septiembre, Orlando Arciniegas, principal cerebro del descalabro y hoy preso en una cárcel de Pereira, por ser el artífice del oscuro entramado que hoy tiene a Ibagué sin escenarios deportivos, involucró al exgerente del Imdri, afirmando que su accionar fue fundamental para que la firma española Typsa se quedara con la adjudicación del contrato 237, equivalente a 11.500 millones de pesos.
A cambio de ello, recibió una coima de 300 millones en efectivo, pagada por el mismo Arciniegas en la ciudad de Ibagué. Ante esta acusación, y luego de haber afirmado que Carlos Heberto no prendería el ventilador con todo lo que sabe, sus abogados manifestaron que existía la posibilidad de negociar algunos beneficios para su cliente, como una rebaja de pena, y la casa por cárcel, al argumentar que no representa peligro para la sociedad.
Es decir, que aún no se sabe, si el señor Ángel, ahora que está preso y con el agua al cuello, se va a dignar a contar cómo es que robaron a Ibagué, y quienes más participaron.
En la audiencia, se hizo referencia al hoy prófugo Oswaldo Enrique Mestre, quien junto a Carlos Heberto Ángel, fueron presentados descaradamente por Arciniegas, ante directivos de Typsa, como “los del negocio”. A estas alturas, ni sus familiares que trabajan en altos cargos de la Gobernación del Tolima, dicen saber dónde está el exsecretario de Hacienda de Ibagué, y sobre quien recae una orden de captura, por haber sido cómplice del descalabro.
A falta de que se aborden los procesos de la construcción de las obras, y cuando se habla de que se avecinan cuatro capturas más, es casi una obligación moral que tanto Carlos Heberto, y Oswaldo Mestre (cuando aparezca), le cuenten no solo a las autoridades, sino a la ciudadanía y al país, todo lo que hicieron, y todo lo que saben.
Hoy los ibaguereños siguen a la espera de lo que pueda pasar con el exalcalde Luis H. Rodríguez, quien ya ha sido acusado de haber acordado un porcentaje por dejar que le metieran la mano al bolsillo a Ibagué, y de quien se dice, su responsabilidad ante el desfalco no sería únicamente política. ¿Será que una de las capturas que se avecinan es la del propio exalcalde? ¿Optará por decir el viejo y conocido refrán de que todo fue a sus espaldas? Sobre el tema de los Juegos, ya nada puede sorprendernos.
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