No hay que desfallecer

Conseguir una ciudad amable, ordenada y limpia es una tarea inacabable, porque para lograr cambios de comportamiento se requiere de perseverancia, y por eso no hay que desfallecer.

Por estos días se han conocido acciones contundentes de la Alcaldía que tienen como fin organizar la ciudad. Estas tienen que ver principalmente con recuperar el orden en el tránsito y el aseo de las calles.

El desgobierno en estos asuntos causa un impacto negativo en la imagen de Ibagué. Por una parte, las basuras que se acumulan en separadores, esquinas y avenidas, y los escombros arrojados en potreros no solo afean la ciudad, sino que son focos de contaminación y son insalubres. 

Por otra parte, la indisciplina de los conductores que no respetan las normas de tránsito son un obstáculo para la movilidad y un problema de seguridad vial, pues sus constantes omisiones a la ley ocasionan accidentes. 

En el primer mes de este periodo de gobierno se han concentrado esfuerzos en atacar estos dos problemas. Los agentes de tránsito están elaborando comparendos a los que infringen las normas, acciones que han causado malestar y hasta agresiones por parte de algunos conductores. De acuerdo con la información oficial, solo en el último fin de semana hubo más de 150 sancionados.

También, la Alcaldía lanzó la campaña “Caza cochinos”, para procurar que las calles permanezcan limpias y no sean utilizadas como basureros a cielo abierto. En esta labor, una despulpadora de frutas que opera en la comuna 7 fue sancionada por arrojar sus desperdicios a la calle, pero en la verificación del lugar, se hallaron más irregularidades, en aspectos sanitarios, como la carencia de registro Invima y la falta de carnés de manipulación de alimentos, lo cual llevó al sellamiento temporal de la empresa.

Así mismo, otro establecimiento comercial, en el sector del Jordán, fue sancionado porque uno de los empleados dejó los desechos del negocio en el separador de la avenida 69, fuera del horario establecido para la recolección de basuras.

La alcaldesa Johana Aranda arrancó su gestión con pie derecho, desarrollando acciones concretas y atacando algunos de los puntos que causan mayor malestar. En las ejecuciones que debe realizar la Alcaldía, en materia de recuperar el orden, contará con el respaldo de la mayoría de los ibaguereños que se encuentran hastiados con el desbarajuste reinante. Conseguir una ciudad amable, ordenada y limpia es una tarea inacabable, porque para lograr cambios de comportamiento se requiere de perseverancia, y por eso no hay que desfallecer.

 

 

El NUEVO DÍA

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