Impecable final. Impecable talento. Con este balance y con los triunfos del cantautor tolimense Luis Alejandro Quevedo, el dueto antioqueño Ilusión y el trío bogotano Opio Trío, concluyó el 21er. Festival Nacional de Música ‘Mangostino de Oro’, en Mariquita.

En esa gala definitiva, el domingo, los 13 grandes finalistas buscaban abarcar cada espacio del coliseo Casa de la Cultura Humatepa con sus interpretaciones, y lo consiguieron con un mensaje claro: la constancia, el trabajo arduo y la intención de trascender más allá de buscar un estímulo económico.

Fiel ejemplo

Entre las tres obras inéditas participantes obtuvo la ‘bendición’ del jurado calificador la obra ‘Cantar’, un bambuco del icononzuno Luis Alejandro Quevedo interpretado solo con su suave voz y su guitarra, con la invitación a que “quienes no han cantado, deberían hacerlo” inmersa en su abundante letra.

“Estoy muy tranquilo, porque sabía que traía una muy buena obra, hecha de corazón, como resultado de mi experiencia como compositor. Lo importante es el contenido y que pueda trascender; el acompañamiento es un gran porcentaje, pero no lo es todo”, afirma tras obtener su primer triunfo en la historia de este concurso nacional.

Dedica este reconocimiento a su familia y a su pueblo, Icononzo, así como al Festival, pues “desde hace tres años que estoy participando he dicho que es un concurso maravilloso y de los más especiales”.

Podría decirse que esta participación es una muestra de valentía y perseverancia, pues en la gala final él se medía con dos obras que traían mayor envergadura instrumental, a cargo de los tríos BossaNova (Tolima) y La Escala (Huila).

“Siento que me he fortalecido como compositor y, lo más importante, que estoy aportando a la cultura y a la patria con el trabajo que hago como autor y como intérprete”, considera Quevedo.

Ilusión de ganar y encantar

Natalia y Marisol Soto Quintero son dos hermanas de Carmen de Viboral (Antioquia) que vienen forjando su carrera desde los cuatro años, y que menos de una década después se convirtió en el dueto Ilusión, con el que han obtenido títulos tan importantes como ‘Princesas de la Canción’ (Ibagué), en 2007.

En lo que respecta al concurso insignia de Mariquita, el primer intento de esta agrupación se dio en 2013, en el que se llevó el segundo puesto, y de ahí vino una pausa para fortalecerse y lograr un trabajo impecable, como el que este domingo le mereció el primer lugar.

“Uno siempre tiene que estar montando cosas chéveres, hacer arreglos y formar la identidad del dueto. Que cada cosa que hagamos tenga un arreglo, que sea bonita y que se vea que es algo bien hecho, y lo hemos procurado”, comenta Natalia, primera voz de Ilusión.

La confianza en mostrar un muy buen trabajo, agrega fue primordial para merecer tanto el Mangostino de Oro en su categoría como el Gran Mangostino de Oro.

Ovación total para Opio

El primer lugar en la categoría Tríos se lo llevó Opio Trío, un proceso juvenil que comenzó en 2015 y que busca dar una cara renovada pero no alejada del romance y de la música de antaño.

“Esta música se ha ido perdiendo, pero queremos seguir adelante”, destaca Joel Moisés León, segunda voz y bajista oriundo de Guayaquil (Ecuador), y quien se une con un bogotano y un nariñense para este grupo que se alza con el Mangostino de Oro en su primer intento.

“Es algo merecido por nuestro esfuerzo y porque les gustó mucho el trabajo innovador que estamos haciendo”, añade.