Muchas frases de alto impacto para el presente y el futuro de la identidad del Tolima surgieron ayer, en medio de la jornada que la asociación Amistad y Mucho Más llevó a cabo en Ibagué, en la víspera del Mes del Patrimonio.

Entre tantas inquietudes mencionadas por distintos actores de la sociedad civil resaltan las que convocan al mayor sentido de pertenencia frente al descuido y la destrucción progresiva del patrimonio arquitectónico en Honda, Mariquita, Ambalema e Ibagué.

Mensaje colectivo

Cabe aclarar que no es un tema nuevo, pero cada vez es tratado con más ímpetu y urgencia, pues los efectos se ven, en su mayoría, a partir del abandono desde las administraciones y desde los actores sociales.

“Es un llamado a la comunidad para que nos unamos frente a la crisis que se puede vivir, en razón de que nuestros espacios están desapareciendo y no hay consciencia en la conservación de nuestra memoria”, señaló el arquitecto Luis Eduardo Mosos, experto en Patrimonio y uno de los panelistas de la jornada.

Por ello, aseguró que el Mes especial que hoy comienza es oportuno para la unión, frente a una estrategia “para recuperar nuestra memoria; vemos cómo se destruyen las casas que son memoria de la ciudad”.

Y fue específico en citar el fundacional barrio La Pola, en virtud de la destrucción de muchas viviendas antiguas y de evidente interés histórico con el fin de dar paso a nuevos desarrollos, tales como torreones y edificios empresariales.

“No queremos decir con esto que la ciudad no se desarrolle, sino, todo lo contrario, que seamos respetuosos y planteemos un desarrollo armónico y consecuente, haciendo la venia siempre a esa memoria que forma parte de nuestra razón de ser”, complementó.

Tarea del Tolima

Mosos puso como ejemplos los antes citados tres municipios del Norte, pero aclaró que el llamado de atención va para el resto el Departamento.

“Tenemos regiones muy ricas en memoria y en historia, y muchas se han formado en torno de su fundación. El llamado es para todo el Departamento, para que hagamos una campaña masiva frente la apropiación y la defensa de este legado, porque estaríamos abocados a perder nuestra memoria, y un pueblo sin memoria es un pueblo sin futuro”, apuntó el profesional.

Por ello, invitó a que el Mes del Patrimonio, institucionalizado en 1998, la comunidad repiense este aspecto desde las actividades que efectuarán en septiembre las universidades De Ibagué y Antonio Nariño.

“No somos solo los arquitectos”

Entre los conceptos expuestos en la actividad estuvieron los del arquitecto Mario Cifuentes, experto en temas de restauración, quien dejó claro que “no somos solo los arquitectos los que hacemos la ciudad, sino cada ciudadano”.

Por eso, instó a que desde las universidades, los colegios y las familias se eduque en la necesidad de conservación, tarea en la que “todos somos importantes”.

Muchas más reflexiones

Luis Eduardo Mosos