"No soy la voz del Gobernador": Amparo Margarita Morales

JORGE CUÉLLAR - EL NUEVO DÍA
La cuñada del Gobernador del Tolima dice que los corruptos le deben tener miedo, a la vez que menciona que muchas de las funcionarias requieren con urgencia un asesor de imagen.

Como la mayoría de los nacidos bajo el signo Tauro, Amparo Margarita Morales Feria es centrada, aficionada al arte, la música, los placeres de la vida y el lujo.

Desde niña mostró unas ideas adelantadas a su época, producto en parte de la lectura, de la que aún hoy es una ferviente seguidora.

Su carácter de libertad cree lo forjó en un internado en Madrid, Cundinamarca, al que fue llevada en su niñez como castigo, pero para ella fue una de las experiencias más gratas que recuerda, al igual que las navidades con sus padres y sus hermanos.

Es diseñadora gráfica egresada de la Universidad del Tolima, y con un especialización en el área efectuada en Italia, país donde vivió y trabajó por cinco años, y al que espera volver muy pronto para reencontrarse con grandes amigos. 

Su profesión la ejerció durante 25 años, la mayoría como asesora corporativa en empresas de Ibagué, entre ellas la Fábrica de Licores del Tolima, la Cámara de Comercio y  la ADT, y ahora está dedicada a disfrutar de sus ahorros, de la herencia que le dejó su padre y a ser la voz de quienes no pueden decir las cosas por temor a retaliaciones.

Amparo Margarita, ¿usted es la voz del Gobernador en lo que él no puedo decir?

No, absolutamente no, porque yo escribo en el periódico hace 15 años y él es Gobernador desde hace un año y medio. Siempre digo lo que tengo que decir y él ha sido una persona respetuosa desde que empecé a escribir, de lo que opino y de lo que digo; seguramente hay cosas que no le gusta que diga, pero nunca se ha atrevido a decirme  o a darme una opinión sobre mis escritos de forma negativa.

Entonces, ¿de quién se considera la voz?

Yo diría que puedo ser en un momento dado, la voz de los que no tienen voz. De los que no pueden decir cosas porque están en su etapa productiva, porque puede haber retaliaciones.

¿Viendo su parentesco con el Gobernador se le han presentado personas a solicitar interceda por ellas por algún puesto?

Sí, al inicio y tengo gente que cuando les contesté rotundos no, me retiraron el saludo, pero estoy agradecida porque ese tipo de personas no me interesa tenerlas a mi alrededor.

Usted es una persona crítica, ¿cómo ve la gestión de su cuñado, el Gobernador?

Pienso que le entregaron un Departamento muy desfalcado, entonces está haciendo el trabajo que debe hacer para recuperar las finanzas del Departamento. Creo que podría nombrar en algunos cargos en secretarías personas más idóneas y no que le ensucien la administración; además se entiende, yo no lo entiendo, que algunas personas son nombradas no por meritocracia sino a dedo por los jefes políticos de las colectividades, pues esa es una práctica que se hace en Colombia y seguramente en muchos otros países, que los jefes políticos indican que personas se nombran, pero no se preocupan por conseguir buenas hojas de vida y gente que vale la pena nombrar.

¿A quiénes se refiere?

No me voy a poner a decir nombres. Hay cosas que uno se entera porque hay gente que se acerca a uno a decirle que está sucediendo esto que no debería pasar, pero igual el día que sean muy graves lógicamente buscaré un acercamiento con el Gobernador en ese sentido para decírselo.

¿Y qué tan buenos cuñados son?

Pienso que excelente en tanto que nos respetamos.

Si su hermana María Elsy es la primera dama del Departamento, ¿usted es la cuñada del Departamento?

No. Ella, tengo entendido que no le gusta que le digan primera dama, porque eso es un rótulo que les pusieron, pero realmente sería la primera dama de Luis Carlos Delgado Peñón, pero no del Departamento, y yo menos, (Risas).

¿Se considera feminista?

No a ultranza pero sí soy feminista, y alego siempre por los derechos de la mujer y creo que eso se ve reflejado en los artículos que escribo y me duele que las mujeres no conozcan sus derechos o no los ejerzan.

¿Usted es de fiar?

Sí, pienso que soy una persona de fiar, y me gusta rodearme de personas que también lo sean.

¿Hay que temerle a su pluma?

El que no hace las cosas bien lógico que me tiene que tener miedo, porque no tengo ningún reato a sacarlo en el periódico; entonces los corruptos y todos los que no estén haciendo las cosas bien que me tengan miedo.

¿Amparo Margarita se atreve a decir cuántos años tiene?

Claro, tengo 64 años, bien vividos.

¿De qué se las cree Amparo Margarita?

No es que me las crea, es que es cierto: soy una persona muy inteligente,  leo mucho, mantengo muy informada no sólo de periódicos y revistas en español sino en italiano que es mi segunda lengua; también leo revistas en francés, aunque debo ayudarme de traductores de Internet, porque me gusta estar informada de lo que pasa en el mundo. No soy de pensamiento local sino universal.

¿De qué vive?

A mí me pensionó mi papá (risas). Trabajé 25 años y dejé de hacerlo cuando me casé porque mi exesposo me pidió que dejara de trabajar para que me dedicara al hogar, que entre otras creo que soy una excelente ama de casa cosa, algo que de pronto algunas personas lo pusieron en duda, porque siempre había sido ejecutiva y viajera. Tengo mi conciencia tranquila que cumplí un rol en ese sentido, y pues si uno trabaja 25 años algo gana y fuera de eso mi papá murió y nos dejó unas cositas.

¿De qué se arrepiente?

De no haberme empezado abrir horizonte al mundo cuando tenía 22 años.

¿A qué le teme?

A nada, o tal vez a la gente envidiosa y mentirosa, pero eso es algo en lo que no vale la pena gastar energía.

¿Le han hecho propuestas indecentes?

Como mujer no, siempre tuve un temperamento fuerte y de pronto en  algún momento que se fueron a sobrepasar tuvieron su encontrón conmigo, porque tenía muy claro a qué accedía y a qué no; y en cuanto a dinero una vez cuando asesoraba la Fábrica de Licores me ofrecieron plata por debajo de la mesa,  por la época en que la marca Tapa Roja se iba a lanzar en Cundinamarca, era una campaña muy grande y una cadena radial a nivel nacional pretendía que se le adjudicara el contrato.

¿Cuál ha sido su peor metida de pata?

Un día llamé por teléfono a una persona y le dije: ola ¿cómo está su mamá? y me respondió se murió hace 10 años, perdón ¿cómo está su papá? se murió hace dos años, me provocaba meterme debajo de la tierra. Eso me marcó y me siento mal.

¿Cuál es la ofensa que más le ha dolido?

No fue directamente a mí, pero sí a las personas que sufren de alzheimer o demencia senil como lo sufre mi mamá que tiene 90 años. Para criticar al Gobernador que es algo en lo que no me meto, porque la gente tiene todo el derecho de criticarle actuaciones, pero no se tiene que utilizar una enfermedad para rebajarlo y minimizarlo. A mí me dolió muchísimo, porque soy una de las personas que tenemos a la mamá con esta enfermedad, fue una ofensa de ciertos medios y del caricaturista de EL NUEVO DÍA, lógicamente él no sabe, pero no es porque yo tenga a mi mamá que no debe hacer ese tipo de caricaturas, sino que tiene que pensar un poquito antes de ofender a la gente.

Con estilo

¿Vanidosa o presumida?

Creo que vanidosa como todas las mujeres que nos gusta vernos en cierto momento bien y además es algo de familia. Mi mamá nos inculcó vestirnos combinadas, que se usara el zapato y la cartera del mismo color y además ella lo hacía  también. Igualmente, tenía una tía que era muy primorosa a la moda y pues eso era lo que veía cuando era chiquita y lo aprendí.

¿Cree que sabe de moda?

Yo creo que sé de moda, que puedo opinar porque la moda no es solo el vestirse, el lucirlo, sino la confección, la finura del cosido. Como yo viví en Italia, el país de la moda, tuve amistad con diseñadores que me enseñaron mucho.

¿A quiénes considera las mujeres con más estilo del Tolima?

Mi hermana es una persona que la admiro mucho, igual ella tiene la misma base que tuve yo, entonces creo que es una persona que siempre ha sabido estar en cada momento.  Aquí hay muchas señoras que también viven muy bien puestas.

¿Y quiénes están pecando?

Entre la gente más joven se ha degenerado la manera de vestir, a veces muy mostranas o recargadas, y resulta que menos es más. Las señoras que a cierta edad tienen el pelo largo me parecen fatales... vírgenes de pueblo. También hay muchas funcionarias que necesitarían un asesor de imagen, pero a gritos.

En sus años mozos

¿Qué recuerda de sus años en Italia?

Fue una época muy interesante, muy importante y de mucho aprendizaje, de abrirme el horizonte en muchos aspectos. Fueron en total cinco años entre los estudios de la especialización en diseño y trabajo.

¿Le echó el ojo algún italiano?

Tuve un novio italiano, ya al final. Fue una etapa bonita, pero creo que no estuve muy enamorada, porque aunque me pidió que me quedara no lo hice.

¿En sus años mozos tuvo muchos pretendientes?

Muchísimos pretendientes y amigos. Mi mamá se molestaba porque el teléfono no dejaba de sonar.

Credito
REDACCIÓN EL NUEVO DÍA

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