Un padre todo terreno es como de entrada se declara Yimmi Chará, el futbolista vallecaucano, figura que se robó el corazón de los seguidores del Deportes Tolima y que ahora vestirá la camiseta de los ‘rayados de Monterrey’ en México.

Este moreno, amante de los relojes y las trenzas, pasa por los momentos más plenos de su carrera deportiva. Él, el menor de la ‘dinastía futbolística Chará’ nunca se visualizó haciendo algo diferente que pegarle a un balón, su mayor pasión.

Estar en una cancha y escuchar los gritos de la hinchada y el pitazo inicial de un encuentro, le hacen sentir emoción y adrenalina, solo comparable con los sentimientos que le genera ver la sonrisa de Juan Pablo, su hijo.

Su primogénito, fruto del amor con Ana María Cobaleda, lo tiene embelesado, cada momento con él es inolvidable. “Ser papá me cambió todo, es muy hermoso lo que me pasa, y lo disfruto”, dice.

La paternidad le ha encantado tanto que quiere tener dos hijos más, para el segundo, que espera sea una niña, ya tiene nombre: Mariana.

¿Cómo se siente de padre?

Muy feliz. ¡Es muy bello ser papá!

¿Cómo le cambió la vida?

Ahora me entra el afán de llegar a la casa.

Además de consentir, ¿Chará ayuda en las labores?

Claro, cuando uno llega a esta etapa toca hacer de todo. Yo soy todo terreno, y hago lo que me digan, si toca bañarlo, vestirlo o dormirlo lo hago con placer.

¿Qué ha sido lo más difícil?

Como todo, ser padres primerizos trae sus contras, afortunadamente hemos contando con el apoyo y guía de mi suegra.

¿Duermen con él?

No, desde que nació directo a su cuna, porque así nos lo aconsejaron.

¿Por qué Juan Pablo?

Le escogimos ese nombre por la Biblia. Somos muy religiosos.

¿Quiere que sea futbolista?

Si le apasiona como a mí, sí.

¿Qué error de padres no quiere repetir con Juan Pablo?

Los castigos. En mi época le daban correa a uno, ahora hay otras maneras de reprender.

Su look

Chará, ¿quién le hace las trenzas?

Mi esposa, aprendió a hacerlas para que nadie más me toque el cabello.

¿Cuándo fue la última vez que se cortó el pelo?

Hace cinco años. El pelo largo es ya parte de mi personalidad.

¿Cada cuánto se lo lava?

Cada tres días.

Pasión por el fútbol...

¿En el fútbol hasta cuándo?

Hasta que Dios y el fútbol lo permitan.

¿Yimmi siempre fue bueno para el fútbol o tuvo su época de ‘tronco’?

Desde niño mostré buenas cosas para este deporte, que me iban a dar la posibilidad de ser profesional.

¿Sus hermanos futbolistas, lo dejaban jugar o lo mantenían en la banca?

Con Diego, el de la mitad, fue con el que más jugué, fue una época linda.

¿Si no hubiera sido futbolista en qué habría terminado?

No sé, siempre me he guiado por el deporte, no tuve un plan B.

¿Qué es lo bueno del fútbol?

Lo que uno siente dentro de una cancha. Ese apoyo de la hinchada es indescriptible.

Y lo malo...

Las concentraciones porque se tiene que estar mucho tiempo fuera de la casa, alejado de la familia.

¿Pesa la cinta de capitán?

Sí, y es algo que traté de hacer de la mejor manera, llevarla con responsabilidad.

¿Quién es su ídolo?

Ronaldo, cuando era pequeño lo veía y soñaba con sus jugadas.

El fútbol le ha dado amigos, ¿también enemigos?

Sí, pero hay que saberlo manejar.

¿Cómo reacciona ante la derrota?

Trato de estar tranquilo y aprender de ella.

¿Llora al perder?

En el fútbol no lo he hecho, pero llegará el momento de las lágrimas.

Muy personal

¿Con qué conquista Chará?

Con las piernas.

¿Qué le mira a una mujer?

La cola.

¿Ha sido infiel?

Sí, y me arrepiento.

¿Su esposa lo ha cogido con las manos en la masa?

Sí.

¿Qué ha hecho para que lo perdone?

Estar con ella...

¿Qué lo saca de casillas?

Muy pocas cosas.

¿Qué lo hace reír?

Todo, soy una persona muy alegre y trato de demostrarlo.

¿Fuera de la cancha lo han dejado fuera de lugar?

Jamás.

¿A quién se encomienda?

A la virgen.

¿Es de muchos amigos?

No, la verdad es que mis amistades son muy pocas.

¿Ha tenido sus épocas de desenfreno?

Sí, como todo jugador, son etapas que se deben quemar.

¿Para qué se considera malo?

Para algunas verduras, y para el estudio, no me gusta.

Siempre se le ve muy callado, ¿cuál es la razón?

Porque soy muy tímido.

¿Vanidoso?

Sí, mucho.

¿Qué no le puede faltar en el armario?

Relojes, me encantan.

¿Tiene colección?

Tenía, pero se nos metieron los ladrones y se los llevaron.

¿Mujeriego?

Eso dice mi esposa.

¿A su esposa le gusta el fútbol?

Sí.

¿Entonces la conquistó con un balón?

Sí, nuestra primera cita fue el 2 de diciembre de 2007, y fue en un partido un domingo a las 5:30 de la mañana.

¿Cómo la conquistó?

Soy detallista, y ella dice que algo particular porque le toca sacarme las palabras, adivinarme.

¿Casado?

Vivimos juntos, pero no nos hemos casado.

¿Fantasean con el matrimonio?

Sí, pero pensamos que por ahora no.