Frutos Secos

Los frutos secos son, al mismo tiempo, semillas cubiertas por una cáscara dura. Tienen un buen contenido de nutrientes, grasas y azúcares; en su composición, el porcentaje de agua como máximo llega a un 50 por ciento y aportan un alto contenido calórico, entre 400 y 600 calorías por cada 100 g.

Se deben consumir crudos y, si se retiran las cáscaras, se reduce notablemente su capacidad nutricional. Se acostumbra consumirlos con sal pero debe tenerse en cuenta los peligros para personas hipertensas.

Como frutos secos se consideran también aquellos que estando frescos y bien maduros, se deshidratan por cualquiera de los sistemas conocidos. Estos últimos son las ciruelas y las uvas pasas, dátiles, higos, albaricoques, plátanos y manzanas. Por su aporte energético y vitamínico, es una buena alternativa para población joven y deportista.


Los frutos que se consideran como secos, por la definición del principio de esta nota, son los siguientes: Almendra, anacardo (marañón), avellana, castaña, maní (cacahuete), nuez, piñón, pistacho, semilla de calabaza, semilla de girasol y ajonjolí (sésamo).


La almendra es uno de los más importantes y es originario de la región de Mesopotamia.


Es el fruto del almendro y se utiliza en gastronomía dulce y salada. En el primer caso es muy común que esté en algunas presentaciones de chocolate y en los mazapanes, y en el segundo, se consumen peladas, doradas en mantequilla, en ensaladas y arroces.


El anacardo que nosotros conocemos como marañón, es originario del nordeste del Brasil. Es el fruto de un vegetal rico en selenio que lo hace antioxidante; en la parte inferior aparece el fruto seco, en forma de riñón, que es su semilla y se incorpora al consumo en las mezclas de “peanuts”.


Las avellanas son unas semillas esféricas, provenientes de Asia Menor y de ellas se consume el núcleo. Se utilizan mucho en pastelería y en la producción de algunos licores. Se cultivan especialmente en Italia y en Estados Unidos.


La castaña es la semilla del castaño que produce un fruto con cáscara espinosa, dentro del cual se encuentran de 3-7 castañas. Este fruto seco se come asado, tostado o cocinado. Fue fuente de alimentación en Europa desde la Edad Media, en forma de harina, masas y pastas.


Hoy se utiliza en pastelería, repostería, en compotas y es el fruto seco con el menor contenido de grasa. El cacahuete, de origen suramericano, es el mismo maní y es el único fruto seco que crece bajo tierra.


Es altamente nutritivo pero debe ser consumido con moderación por su contenido graso que es muy alto. Se incorpora como ingrediente en dulcería; se consume también en granos y mezclas de otros frutos y con él se elabora también una mantequilla.


La nuez, proveniente de Persia, es un fruto seco obtenido de la semilla del nogal que es un maderable de alta calidad. Se utiliza en ensaladas, en salsas, repostería y panadería.


Existe un producto denominado nuez del Brasil, de una forma muy diferente, compacta, grasosa, muy utilizada en gastronomía, entera o picada, y se obtiene en forma silvestre proveniente de árboles muy grandes de las zonas de la Amazonia.


El piñón es la semilla de algunas variedades de pino. Se produce en los bosques y se extrae de los 'pétalos' de las 'piñas' que se producen a manera de flor. Este es un fruto muy costoso por la tarea manual para su recolección, altamente nutritivo y se usa en la elaboración del famoso 'pesto' de los italianos, en ensaladas y en confitería.


Los pistachos son muy conocidos en nuestro medio y su degustación va creando cierto tipo de adicción por su delicioso sabor. Este fruto seco es la semilla del alfónsigo, árbol no muy grande que proviene del Asia, más exactamente de Irán que hoy es el primer productor mundial.


Con los frutos secos se pueden elaborar muchos platos. Entre estos están las ensaladas de vegetales frescos elaboradas con hojas verdes, queso rallado, maní, pistachos, almendras o piñones y, obviamente, con la vinagreta o aderezo de su preferencia. Puede agregarle frutos secos a algún arroz de su preferencia. En los arroces de estilo oriental, puede agregar frutos secos y también deshidratados como uvas o melocotones.


Alitas de pollo con frutos secos
Esta receta es muy sencilla y especialmente útil para hacer de una pieza del pollo de poca utilización, un plato delicioso. Calcule 3-4 alitas enteras por persona y asegúrese de tener caldo de pollo, hecho en casa.

Para 4 porciones, en una cacerola ponga 6 cucharadas de aceite de olivas y dos dientes de ajo aplastados. Cuando esté caliente ajuste la temperatura al nivel medio bajo e incorpore 16 alas de pollo. Mantenga la cocción removiendo periódicamente hasta que estén doradas por todos los lados y los jugos comiencen a emulsionarse con el aceite.


Vierta 1 taza de caldo de pollo y deje cocinar hasta que se reduzca el líquido. Continúe con esta operación por 15-20 minutos hasta que las alas estén bien cocinadas.


Retírelas de la cacerola, corte y deseche la sección de la punta de las alas que son muy grasosas, y reserve las otras dos secciones.


En la salsa que quedó ponga 50 gr. de almendras peladas y doradas y 50 g de piñones o de maní. Agregue miel de abejas a su gusto, no más de 4 cucharadas, y a la misma temperatura media deje reducir la salsa la mitad.


Incorpore las alitas reservadas, salpimiente, remueva bien y sirva caliente. Esta preparación la puede acompañar con papas a la francesa. Por supuesto que esta receta la puede ejecutar con otras partes del pollo, troceadas y con los frutos secos que encuentre disponibles.

Credito
YEZID CASTAÑO GONZÁLEZ

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