Ofrezca calidad en sus servicios

ARCHIVO – EL NUEVO
Si usted se queja por las ventas bajas, es posible que haya esperado con optimismo la temporada de fiestas para mejorar sus ingresos. Ciertamente los tiempos no son fáciles, por lo que hay que aprovechar al máximo la presencia de muchos turistas y visitantes para que se sientan motivados a realizar importantes consumos.

Es, entonces, cuando el empresario se pregunta ¿Cómo hago para vender más? En primer lugar hay que insistir en la imagen del negocio. No confunda típico con ordinario, ni económico con baratijas. Es común que para los días del folclor decoren con detalles “típicos” las vitrinas y el interior de los negocios pero, en muchos casos, lo que se observa es una gran falta de imaginación y de creatividad; es recurrente extender una falda cómo si ésta fuera la principal expresión del folclor, otros ambientan las fachadas con unas hojas de plátano que el primero y segundo día lucen bien pero al tercero ya se ven marchitas, quitándole gracia a la decoración y a veces haciéndola parecer como basura.   

Contrate gente que sepa de servicio y supervise; ocurre que anticipándose al mayor número de clientes contratan algunos extras, sin la capacitación adecuada y ofrecen un servicio deficiente sin considerar que esta falta de calidad en la atención es uno de los factores que más alejan a los clientes del establecimiento o, por el contrario, no se contratan más por no incrementar  los gastos lo cual igualmente lleva a ofrecer un servicio deficiente.


Cuide la presentación del personal. Exija calidad en la imagen del  personal.  Con el argumento de no gastar mucho, olvidan el impacto de la imagen del personal y, al momento de seleccionar, poco tienen en cuenta que su imagen es parte importante de la imagen del negocio.  Les  permiten vestir ropa inadecuada para el servicio como camisetas con escotes profundos, minifaldas, delantales descosidos y desteñidos, chanclas, o no se preocupan por la nitidez en su ropa o persona, entre otros, con lo cual  contribuyen a ofrecer una imagen poco favorable del negocio, situación que es más grave cuando se trata de un sitio que vende alimentos.


Es muy claro que se requiere un estricto manejo del gasto pero, también es cierto que su reducción se debe hacer estratégicamente, y no sobre factores que afectan de manera sustantiva la calidad del servicio.


Es importante que los empresarios observen el negocio con ojos de cliente, pues cada día las personas son más exigentes y siempre buscan asegurarse de obtener lo mejor por el dinero que gastan. Un buen servicio hace más grata la experiencia de compra y más fuerte la recordación del sitio.


Escuche cómo se expresa el personal. Se encuentran empleados que no saludan o que dicen "¿A la orden madrecita?", o  "¿En qué le puedo servir “monita”, “reina”, “muñeca”? y otros que tutean al cliente.


Cada empleado debe conocer muy bien los productos del negocio. A veces tienen poco conocimiento de lo que venden, cómo funcionan o de qué está hecho,  y tranquilamente dicen "No sé" sin mostrar una mínima disposición para ofrecer una respuesta satisfactoria; otros, responden con un "No hay" pero no presentan  otras opciones, perdiendo así la oportunidad de vender.


Esta es una buena época para mejorar sus ventas, y  usted puede lograrlo si se ocupa de todos aquellos detalles que contribuyan a atraer al cliente; entonces, esté pendiente y saque tiempo para mirar "del otro lado del mostrador", para ponerse en los zapatos del comprador.


Recuerde que los resultados del negocio tienen mucho qué ver con la gente que atiende al público; por ello requieren conocimiento, capacitación y muy buena actitud. Haga que su negocio sea especial a los ojos de sus clientes y aproveche la buena oportunidad  que representan las Fiestas, no sólo para beneficiar a su negocio sino para hacer quedar muy bien a la ciudad.

Credito
MARTHA CRUZ Especial para EL NUEVO DÍA

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