A su vez, en el mercado hay una amplia variedad de seminarios, talleres, conferencias, etc… sobre el mismo tema, actividades a las cuales las empresas suelen inscribir a sus colaboradoras con el objetivo de que cada día tengan un mejor desempeño y contribuyan a realizar de manera más eficiente su tarea. 

Sin embargo, es muy escaso encontrar un libro o un seminario dirigido a los directivos, donde les den instrucciones y entrenamiento para ser mejores jefes o para tratar a las secretarias de manera que potencien sus capacidades y se les valore su trabajo.   

Por ello, a continuación registro algunos comportamientos que deben revisar los jefes para generar condiciones que permitan a las secretarias cumplir mejor sus funciones, hacer amables las largas jornadas que deben permanecer en el trabajo y sentir que su labor es apreciada.

Salude, salude, salude

Controle el mal genio

No hable a gritos, con certeza ella no es sorda

No le haga decir mentiras, puede traerle inconvenientes

Evite encomendarle adicionalmente tareas de tipo familiar 

No la involucre en problemas personales, esos resuélvalos por su cuenta

Evite convertirla en su confidente sentimental, a veces se crean situaciones muy incómodas para ellas.  

No asuma que ella es adivina, diga claramente lo que necesita o espera.

Dé instrucciones precisas. Decir tempranito, tarde, poco, lo más rápido posible, tan pronto pueda, no son suficientes para ejecutar una tarea como usted lo espera.  

Exija, pero no pida más de lo posible

No exagere con las jornadas laborales, recuerde que ella tiene familia, hijos, o padres que atender.

Evite llamarla por asuntos de trabajo durante los días de descanso, déjela disfrutarlos con tranquilidad.

No se acostumbre a dar instrucciones para hacer nuevas tareas cuando faltan solo cinco minutos para terminar la jornada laboral.

Si le toca extender las jornadas, entonces sea también flexible en otros momentos con el manejo del horario.

Desde el inicio tómese su tiempo para poner en común su estilo en cuanto a la redacción de sus cartas, correos, manejo del teléfono, etc.

Acuerden cómo será el manejo de la agenda, eso le evitará dolores de cabeza.

Llame cuando no pueda llegar a cumplir con lo previsto en la agenda, así ella podrá saber cómo actuar con quienes vengan a cumplir las citas.

No la haga quedar mal ante los demás, ni le llame la atención frente a otras personas.

Permita que se capacite, dele tiempo para que pueda participar en cursos. Una buena secretaria necesita estar actualizada y formarse continuamente.

Son tantas las horas laborales que un jefe comparte con su secretaria, que bien se justifica el hacer el esfuerzo para que los dos puedan hacer un excelente equipo, donde las dos partes encuentren satisfacción profesional y crecimiento personal. Es la única forma de alcanzar mayores y mejores logros.

¡Feliz Día de la Secretaria¡