Esas relaciones son “una gestión premeditada y planeada para establecer y mantener la buena voluntad, aprecio y comprensión entre las empresas u organizaciones y su público, o las personas con quienes se relacionan” y de esto todos necesitan, incluidos políticos, artistas y dirigentes de muy diverso tipo.

Su práctica es estratégica para el logro de sus objetivos, pues es claro que es más fácil alcanzarlos con el apoyo y la voluntad de otros, que hacerlo con la indiferencia de los demás. Unas buenas relaciones públicas mejoran el posicionamiento de la empresa o persona, logra mejores negocios y contactos, adquiere mayor reconocimiento y credibilidad y mejora en general la imagen.

Un buen trabajo de relaciones públicas puede dar a un pequeño negocio tal efectividad en su promoción como lo podría dar una campaña publicitaria pagada: basta un poco de creatividad y decisión para hacer de ella una forma económica y efectiva de promocionar la organización.

Son varias las acciones que puede adelantar

Entre las más sencillas y que es posible que usted no haya considerado lo mucho que influyen en la forma como es percibido y recibido por los demás, y que, además, no cuestan mucho, tenemos:

-La fachada de su negocio u oficina. La imagen que ofrece habla de su propietario; si no está en buenas condiciones, comience por pintarla o renovarla. Es mucho más atractivo entrar a un lugar aseado, con un mobiliario en buen estado, decorado con buen gusto y ordenado, que llegar a otro que refleja abandono y desaseo. El aviso también cuenta y mucho; revise el estado en que se encuentra, si los colores ya se destiñeron, si las fotos que lleva están decoloradas o le faltan letras, o si en su defecto está sucio o tiene escritos en la pared.

-Considere la imagen de quienes lo atienden. Observe si sus colaboradores son respetuosos y amables con el público, si el uniforme que llevan está en buenas condiciones, si lo llevan bien puesto, o si por el contrario, la ropa es inadecuada y no concuerda con la imagen que quiere proyectar de la empresa.

-Analice el tipo de papelería que utiliza; es posible que ella no refleje una empresa actualizada. Revise sus tarjetas personales, pues su uso aún sigue vigente, no sea de quienes dejan sus datos en “papelitos” que luego no se encuentran, perdiendo así oportunidades de negocio.

-Una buena estrategia es vincularse a los gremios empresariales y especializados de su sector y concurrir a los eventos que organizan. También, participar en eventos o actividades deportivas, festivales, ferias, exposiciones, labores sociales, etc. Pero, no es sólo cuestión de asistir: le ayudará mucho si participa donando productos de la empresa para una actividad recaudadora de fondos para obras de beneficio social, ofrecer productos como premios para un campeonato o sorteo, patrocinar los afiches o el material impreso, etc. Es cierto que ésto puede costarle algunos pesos, pero lo justifica la promoción que recibe.

-Construya redes. Estar conectado con el sector empresarial puede generar una buena publicidad boca-a-boca. Inicie una colaboración o cooperación, con otra empresa o grupo de empresas y atraiga la atención de los medios. Apoye la realización de conferencias, foros y seminarios.

-El inicio del año es época propicia para diseñar e iniciar su plan de relaciones públicas. No lo posponga; su esfuerzo se verá recompensado si es persistente con la tarea.