Sin embargo, Gutiérrez no pudo hacer claridad de cuál es el monto a castigar al no efectuarse las labores de cobro para recuperar los dineros y que afectarían las finanzas de la empresa.

“La cartera no se ha aumentado, lo que hemos tratado es de disminuirla, pero lo que estamos haciendo es un análisis de cuál se puede castigar y cuál no, y esa es la meta porque este no es un tema de decir voy a eliminar esto, no, tenemos que medirla y reducirla y saber cómo vamos a hacer”, dijo Gutiérrez, al finalizar la rendición de cuentas el pasado viernes en la sede de la Universidad Cooperativa.

Sin embargo, la Contraloría en su informe de auditoría para la vigencia 2017 resaltó que la empresa no ha gestionado el procedimiento de la recuperación de la cartera de una “forma eficiente, oportuna y continua, y evidenciándose una falta de gestión fiscal”.

De acuerdo con el documento, al hacer la revisión del grupo de deudores se establece que ha venido “incrementándose la cartera de difícil recaudo, cada vigencia hasta llegar a los dos mil 410 millones 385 mil pesos”.

Es de resaltar que la auditoría estableció que las cuentas por recaudar de la entidad de difícil cobro, presentaron un aumento representativo con respecto a 2016 correspondiente a tres mil 199 millones y equivalente al 32.87% .