En las últimas semanas las filtraciones de agua han sido más críticas en este barrio, debido a que el preciado líquido ya aflora por las aceras de la carretera. “Estas tuberías se están rompiendo desde arriba del camino que lleva a La Coqueta hasta abajo donde está la campana, son tres o cuatro cuadras las afectadas, los señores del Ibal no nos explican qué pasa, solo vienen, rompen, remiendan y al tiempo vuelven a arreglar de nuevo”, dijo un reconocido vocero de la comunidad.

La empresa de Acueducto y Alcantarillado, Ibal, se pronunció al respecto: “Se debe aclarar que las fugas que se han presentado corresponden al antiguo sistema Cay. El nuevo no ha presentado ningún tipo de daño. El Ibal hizo la verificación del sistema del Cay antiguo y nuevo para identificar con claridad las causas de las filtraciones y fugas. Al verificar el estado del sistema antiguo Cay, se hizo la suspensión del mismo, pero como este sistema cuenta con el canal abierto, con las fuertes lluvias se conducía el agua hacia la tubería; esto generó acumulación y exceso de agua, que llevó nuevamente a observar fugas por la ventosa del sistema antiguo de Cay”.

Sin embargo, la comunidad afirmó que las afectaciones se dan en el tubo del nuevo acueducto, que es la misma tubería que ellos vieron instalar al consorcio Aguas para Ibagué en el sector. En esta temporada de lluvias el líquido rebosa por los huecos que destapó el Ibal para reparar la tubería, siendo constantes las inundaciones que padece la población.

Las afectaciones en las viviendas son evidentes, el agua se filtra debajo de estas provocando riesgo de deslizamineto debido a que están construidas a un costado de la carretera, y detrás de estas, en la zona boscosa se encuentran otras casas. En el barrio ya hay un damnificado, a consecuencia de que parte de su casa se desprendió en la parte posterior, y otras dos han sido desocupadas en diferentes pisos a raíz de la humedad y las filtraciones.

Sumado a lo anterior, en varios puntos de la carretera se aprecian las reparaciones y algunos hundimientos, mientras en varias casas sobre la fachada se evidencian grietas que según los vecinos del barrio son consecuencia de la problemática.

Sobre la parte baja, detrás de las viviendas que están al borde de la carretera vive Aura Elisa Pulistar Anama, que manifestó: “No pedimos que paren el proyecto, de ninguna manera, pero sí que hagan las cosas bien (…) parte del paradero hacia arriba siempre presenta fugas continuas y de hecho en estos días se reventó otra vez el tubo y abrieron un hueco ahí, la cantidad de agua ya parece un río, ya hemos hablado con el señor Alcalde pero no nos ponen cuidado, estamos en una bomba de tiempo”.

En este sentido, el Ibal comunicó que “en la parte urbana de la Coqueta se cuenta con las dos tuberías del nuevo y antiguo sistema Cay, en el antiguo sistema se identificó una ventosa que no se tenía registrada en el sistema, pues fue hace más de 60 años que se construyó y en su momento la taparon con cemento, por lo que cuando en la antigua tubería se generan excedentes de agua, en la superficie se observan fugas y filtraciones en la vía, las cuales preocupan a la comunidad”.

La empresa encargada de contratar la obra acueducto Cay fue Findeter, y el Consorcio Aguas para Ibagué fue el que ejecutó los trabajos. Cabe recordar que la obra desde un principió tuvo inconsistencias que en su momento el gerente del Ibal, José Alberto Girón, explicó a través de un comunicado el 19 de agosto de 2018, las fallas acontecidas.

Ante el actuar de la comunidad el vocero concluyó: “Nosotros nos hemos reunido con el consorcio, la Alcaldía, el Ibal, la Personería y con la Contraloría, y siempre es la misma súplica; por qué, para dónde se desplazan los vecinos, pero la respuesta es la de siempre, que tenemos que escribirle al consorcio o a Findeter”.

Por otra parte, la empresa de alcantarillado ante una posible solución sostiene que se “está trabajando en montar una válvula entre el canal y la tubería cerrada del antiguo sistema para mantener toda la conducción”.

Dato

Son alrededor de 21 familias afectadas, integradas cada una por tres o cuatro personas.