Con el anuncio de la Clínica Tolima de dejar de ofertar los servicios para la atención de maternas a partir del próximo 20 de diciembre, la Secretaría de Salud municipal señaló que habilitará desde el 1 de ese mismo mes, el servicio de ginecobstetricia las 24 horas en la Unidad de Salud de Ibagué (USI) sede San Francisco.

Dicha medida, según dijo Johanna Barbosa, secretaria de Salud de Ibagué, es con el fin de poder brindar atención oportuna a la comunidad que lo requiera del régimen contributivo, subsidiado y población pobre no asegurada.

Barbosa indicó que mediante un comité realizado el jueves, se determinó que la USI tiene la capacidad para soportar parte de la problemática, con un servicio de mediana complejidad que desde agosto del 2018 está habilitado.

“La Clínica Tolima, entre enero y octubre 31 del 2019, atendió 2.918 partos, eso significa que la USI, una vez se surtan los procesos de negociación con las EPS del contributivo, entraría a apalancar parte de la demanda de estos servicios, específicamente de atención a partos”, acotó Barbosa.

La deuda

La funcionaria explicó que el motivo del cierre de los servicios de maternidad en la Clínica Tolima por parte de la gerencia, obedece a la necesidad de ampliar y mejorar las condiciones del servicio de urgencias con cambios en la infraestructura, por lo que la clínica solicitó para tal fin, mediante mesas de negociación, el pago de la deuda de las EPS e incluso anticipos, situación a la que se negaron las entidades y que obligaron a la gerencia a prescindir de tales servicios para evitar poner en riesgo el equilibrio financiero de la institución.

Según Barbosa, la cartera de las EPS con la Clínica Tolima asciende a corte de octubre, a más de $35 mil millones, situación a la que el municipio le viene realizando auditorías, pero que serían del resorte de la Superintendencia de Salud.

“A pesar de que la Secretaría de Salud municipal realiza los procesos de auditoría de los indicadores entre ellos la cartera, nosotros no tenemos las competencias, ni las herramientas jurídico administrativas para hacer intervenciones a las EPS (...) es resorte de la Superintendencia intervenir y actuar directamente en estos problemas que tenemos de cartera”, acotó Barbosa.

Esta redacción conoció los montos que hasta el 31 de octubre le adeudan las entidades a la Clínica Tolima, siendo la Nueva EPS, la que mayor cartera tiene con un monto de más de $11 mil millones, seguida por la EPS Sanitas en su plan empresarial por $3 mil 383 millones, la Unión Temporal Tolihuila, que atiende a los docentes del Tolima, por $3 mil millones y la Dirección general de Sanidad Militar por $2 mil 760 millones.

A la lista también se suman Coomeva EPS, Asmet Salud EPS, Salud Total, la clínica Emcosalud S.A, Famisanar, entre otras. Resalta en el panorama la deuda que tiene la Secretaría de Salud del Tolima, por un valor de $1.455 millones.

A negociación

Ante la necesidad de atención, la Secretaría de Salud entró desde ayer en negociaciones con las diferentes EPS del régimen contributivo, esto con el fin de fijar los recursos y evitar “huecos financieros”.

“Menciono el tema de la negociación porque nosotros esperamos que las EPS del contributivo no nos abran un enorme hueco a las finanzas de un hospital que después de cuatro años de un gran trabajo tiene rendimientos y utilidades operacionales de $1.200 millones, producto de la apertura de nuevos servicios”, dijo Barbosa.

Las mesas de trabajo con las EPS se realizan desde ayer y se programarán unas nuevas con la Procuraduría y Personería para establecer unos mecanismos diferentes que generen recursos.