Luego de que el Ministerio del Deporte y la Procuraduría le 'pusieran la lupa', a la licitación del Coliseo Mayor avaluada en $43 mil millones y de que el alcalde, Andrés Fabián Hurtado, anunciara que se declarará desierto el proceso contractual, se conoció que en las observaciones hechas por el comité evaluador del Imdri, el oferente y hasta hace unos dias virtual ganador de la licitación, la Unión Temporal Ágorasports, tampoco cumple con las exigencias solicitadas en el pliego de condiciones.

Esta situación daría aval al anuncio del mandatario local; sin embargo, el oferente asegura que tales observaciones están dotadas de: "temeridad, irresponsabilidad y extralimitación de un comité evaluador que basó su gestión y labor encomendada en interpretaciones subjetivas y "a priori"".

Entre las observaciones del comité se cuestiona el personal solicitado en la licitación, pues el oferente presentó la documentación de un especialista en geotecnia que obtuvo su título en 2016, pero cuya experiencia es de 2015, situación que para el comité se puede entender como una posible falsificación de documento.

Asimismo, se cuestiona la presentación de un arquitecto, cuando en los ítems se pedía a un ingeniero civil; sin embargo, ante esto la empresa señala que se cambiaron las reglas en la participación para inducir al oferente en un error.

Los argumentos de la empresa Ágorasports se basan en los documentos de estudios previos y pliego de condiciones que dan la opción de elegir entre dos profesiones diferentes, pero que en el pliego definitivo es modificada.

"De acuerdo a lo exigido se cumple con una de las profesiones solicitadas; sin embargo y a pesar de lo plasmado en la etapa de planeación del proceso se califica como no cumple porque como ya se dijo, sin razón aparente y sin que se presentara observación sobre este particular, la entidad en su pliego definitivo realiza abruptamente un cambio", indicó la empresa colombo española.

Como hecho curioso, la experiencia que se le acredita a este profesional tiene relación con los fallidos Juegos Nacionales del 2015, esta persona través del antes llamado Coldeportes, tenía como como objeto brindar apoyo y asesoría técnica en el proceso de infraestructura deportiva de ese entonces, situación que para el comité también inhabilita al profesional para hacer parte del equipo constructor.

Asimismo se rechazó el equipo mínimo exigido de topografía al no existir un certificado de calibración del que asegura la empresa, nunca se solicitó como requisito.

La solicitud final del único oferente para la construcción del Coliseo Mayor, es que el Imdri deje por escrito que el oferente no ha incurrido en ningún tipo de falsificación e incluso indicó que dichos señalamientos podrían desatar pleitos legales.

 "Se podría decantar en potenciales acciones en contra de la entidad por incurrir en posibles conductas punibles tipificadas en la legislación colombiana por atentar contra el buen nombre de empresas serias, responsables y de alto reconocimiento", dijo el oferente.

Al cierre de esta edición aún no se visibiliza en la plataforma de contratación estatal Secop II, algún cambio en la licitación.