Luego del anuncio del Ministerio de Educación, sobre el retorno a los establecimientos educativos para culminar el año escolar a partir de agosto bajo el modelo de “alternancia”, profesores, padres de familia y rectores en Ibagué aún tienen dudas ante un posible regreso a las aulas en medio de la contingencia sanitaria.

La propuesta del Gobierno nacional, sujeta a la evolución epidemiológica de la pandemia por Covid-19, combina las actividades presenciales con aprendizaje en casa y diferentes alternativas tecnológicas.

El primer paso, se dio con la directiva 012 de Mineducación, en donde se le pide a los colegios privados y jardines infantiles adoptar las medidas de bioseguridad.

Hernán Sigifredo Rubio, presidente de la Asociación Sindical de Directivos Docentes del Tolima, indicó que no es prudente se inicie con la alternancia, pues considera que la situación pone en riesgo a la población.

“Hemos analizado muy a fondo la situación, y no hay instituciones educativas en las que su infraestructura esté adecuada para este tipo de situaciones, siempre se hicieron herramientas colectivas, conjuntas. Tendríamos que hacer una readecuación, si dieran la oportunidad y el presupuesto, pues uno haría los acondicionamientos, los colegios privados podemos decir que tienen más músculo financiero, ¿pero sí será cierto?, porque ellos se sostienen de pensiones y si los padres no pagan”, puntualizó Rubio.

La propuesta de Rubio es que se vuelva a las clases en el 2021, cuando al menos se haya superado el pico de la enfermedad como lo prevén las autoridades sanitarias.

¿’Profes’ a las aulas?

El líder de este grupo sindical advirtió que así se quisiera implementar la medida, de citarse a los docentes en la región siguiendo las restricciones, “el 40% de los maestros no podría ir a clase”, debido a sus antecedentes médicos.

Esta redacción se comunicó con varios maestros quienes pidieron reserva de su nombre, pero que se mostraron inconformes ante la medida.

“Yo creo que la mayoría de colegios privados de calidad en Ibagué, podrían cumplir con los parámetros de bioseguridad; no obstante, hay que entender que son niños, no sé hasta qué punto puedan seguir esos parámetros, además considero que todavía el país no está para eso. Pese a que las clases virtuales consumen más tiempo y trabajo, no es el momento”, dijo uno de los docentes de un colegio privado.

Otra maestra resaltó que si bien el cuerpo humano necesita empezar a tener contacto con el Covid-19, teniendo en cuenta que no va a desaparecer, “es irresponsable abrir los colegios para que ese proceso de adaptación se termine en el aula”.

“¿En serio queremos ir al colegio para volver a casa a enfermarnos?, no miento, el trabajo para nosotros se ha triplicado, pasamos 14 horas frente al computador, pero enfrentémonos primero al virus en otro ambiente lejos del aula”, reseñó la docente.

Otros docentes calificaron la medida como “extrema”, teniendo en cuenta que sumado a la labor de enseñanza también deben asegurar y cumplir los protocolos de bioseguridad entre los estudiantes y los mismos colegas.

Posiciones divididas en padres de familia

EL NUEVO DÍA consultó con sus seguidores y padres de familia la medida y sobre la decisión de enviar a sus hijos clases presenciales, una opción que genera opiniones divididas. Una amplia mayoría advierte que está dispuesto a que su hijo repita el año escolar, pues asegura que no existen las condiciones, otros aseguran que desde que existan todos los protocolos de seguridad sí es posible retomar de forma gradual la presencia de los jóvenes en los claustros educativos.