Con temor de una posible propagación de leishmaniasis vive en la actualidad buena parte de los habitantes del corregimiento de Bilbao, en Planadas.

Allí la enfermedad ha tocado a varias familias y, según un líder de la zona, en total van 14 personas que están pidiendo a gritos medicamentos para contrarrestarla.

Uno de los casos más preocupantes es el de un hogar de esta población, donde papá, mamá e hijo ya fueron diagnosticados con leishmanasis y pese a que han golpeado diferentes puertas para ser curados, aún no lo han logrado.

“Ya hemos hecho todo lo que está a nuestro alcance, y nos dijeron que teníamos que esperar hasta que llegara la droga y llevo un mes con la enfermedad”, dijo David Cuéllar, el padre de la familia que se encuentra afectada.

Asegura que lo que más le preocupa es que su esposa y su hijo tampoco han recibido la atención adecuada.

“Nos sentimos muy mal, además yo tampoco he podido ir a trabajar y eso también nos perjudica, porque yo tengo obligaciones”.

Pero David no es el único, en el sector donde el vive varias personas tienen esta dolencia, por lo que cuando se vio con los síntomas acudió al hospital de Planadas y el examen salió positivo.

“Lo que les estamos pidiendo es que nos ayuden con la droga y económicamente, porque no hemos podido laborar”, puntualizó Cuéllar.

Alarma en la población

Willington Gutiérrez Collazos, líder de la zona, dijo que pese a que se conoce que en el municipio esa enfermedad es usual, es la primera vez que ataca a este corregimiento fuertemente.

Según el, ya van 14 casos entre esos dos niños que tiene preocupados a sus padres y la comunidad en general, porque temen que se extienda.

“Había indicios de la enfermedad, pero no se le había prestado atención. Lo que pasa es que las personas no conocen mucho de la enfermedad entonces solo decían que habían sentido como una picazón y cuando asistían al hospital ya estaban avanzados”, aseguró el líder.

Indicó que en relación con la atención no se puede quejar, pero la falta de medicamentos es lo que los tiene preocupados. En Bilbao solo hay un puesto de salud, por lo que han tenido que ser remitidos al hospital de Planadas.

“La carretera se encuentra en muy mal estado, y ese es otro de los factores que nos preocupa, ya que las personas tienen que trasladarse hasta el centro médico y no les entregan la droga”, aseguró.

Con relación al apoyo de las autoridades de salud, dijo que hasta el momento no se ha dado, por lo que espera que en los próximos días pueden recibir atención.

“No sabemos cómo se controla y por eso cada vez más se conoce personas con esta enfermedad.

“El llamado es para que se pongan la mano en el corazón, porque necesitamos con urgencia la atención, además de campañas de sensibilización para poder protegerse”, comentó Gutiérrez.

Por último, dijo que este viernes se adelantará una reunión a las 11 de la mañana en la escuela San Jorge, para hablar sobre la enfermedad en el municipio.

“Los medicamentos llegaron tarde”

El alcalde de Rovira, Diego Guerra, hace algunos meses enfrentó en su municipio una proliferación de esta enfermedad, y señaló que hasta finales de diciembre los pacientes recibieron los medicamentos.

“Estuvo un poco lento la iniciación del tratamiento para la leishamaniasis, ya que Rovira era uno de las poblaciones que estaban punteando, pero ya los casos han disminuido, por lo que seguiremos haciendo seguimiento”, dijo el mandatario.

Por su parte, Aldo Beltrán, del Centro Regulador de Emergencias y Desastres en el Tolima, dijo que desde hace algunos meses se viene trabajando sobre la enfermedad, y que ya hay un grupo especializado para atender a la población de Bilbao y conocer el procedimiento que se debe seguir.

“Hay muchas enfermedades de la piel que pueden parecerse, por lo que se debe acudir a un médico general y que este lo remita a un dermatólogo”, afirmó.

Según el funcionario, la zona del sur del Departamento, es donde más se presentan estos casos y, según explicó, los medicamentos existen pero son de uso restringido.