Familias en su Tierra beneficiará a Natagaima, Rioblanco y Ataco

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
Al menos 700 familias de Natagaima, Rioblanco y Ataco podrán beneficiarse a través del programa, mediante restitución de tierras y subsidios económicos.

Familias en su Tierra es una estrategia liderada por el Departamento para la Prosperidad Social (DPS) en coordinación con la Unidad de Atención a Víctimas.

Con ella se busca implementar medidas rápidas de asistencia y acompañamiento a la población víctima del desplazamiento forzado, y que está en proceso de retorno o reubicación rural.

El programa también tiene como finalidad generar o potenciar capacidades en las familias para su auto sostenimiento digno en lo social y lo económico.

Familias en su Tierra inició un proceso para la vinculación de 14 mil nuevos hogares víctimas del desplazamiento forzado, los cuales retornaron a sus tierras en 70 municipios de 14 departamentos del país. Allí se incluye Natagaima, Rioblanco y Ataco.

Según explicó Ana Milena Negrette, coordinadora del Programa, esta iniciativa tendrá un acompañamiento especial para las familias beneficiarias, con el objetivo de que puedan regresar a sus predios abandonados.

“La idea es que al regresar de manera voluntaria a las tierras de donde fueron desplazados, puedan conformarse de nuevo como comunidad”, indicó Negrette.

El acompañamiento a las comunidades será por 30 meses, en los cuales un grupo de profesionales ayudará a estas personas a iniciar su proceso de retorno y reconstrucción de convivencia comunitaria.

“Para este acompañamiento de retorno comunitario se entregarán unos incentivos económicos condicionados para que estas familias puedan iniciar y subsanar las dificultades que tengan al momento de regresar a sus tierras”, agregó.

El subsidio que se entregará será de un millón 200 mil pesos, además se otorgará un incentivo que el programa denomina Incentivo al Hábitat, con el cual se espera subsanar las deficiencias que se tengan en las viviendas.

“Lo que hacemos es preparar a la familia para empezar a incentivarlos y fomentar un arraigo mediante el trabajo de la tierra, por lo que se impulsará la construcción de huertas de consumo, a través de la producción de alimentos sanos (...) para que recuperen la vocación productiva que tenían”, puntualizó.

Credito
EL NUEVO DÍA

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