A partir del 3 de junio se inicia el proceso de entrega de la administración del hospital Federico Lleras Acosta a la Gobernación del Tolima, la decisión obedece a que según concepto técnico del Ministerio de Salud, las causales que originaron “la intervención Forzosa Administrativa han sido superadas”.

Por ello, durante las siguientes ocho semanas se cumplirá un cronograma que incluye reuniones de empalme y la entrega por áreas, también, la apropiación de recursos por parte de la Administración seccional y finaliza con el recibimiento de la entidad de parte del gerente y la Junta Directiva.

El proceso quedó fijado en la resolución Ejecutiva 070 del Ministerio expedido el 30 de mayo, documento mediante el cual se extiende por dos meses más la intervención forzosa, es decir, que va hasta el 2 de agosto, desde esa fecha el ente territorial deberá entrar a ejercer de manera directa el manejo del principal del centro hospitalario de la región.

A esta conclusión se llegó luego de evaluar el trabajo adelantado en el marco de la intervención durante los últimos cuatro años y nueve meses, y tras conocer el informe presentado por la interventora Inés Loaiza a la Superintendencia Nacional de Salud, en el que se concluye que “el flujo de los recursos provenientes de la recuperación de la cartera es levemente inferior a las necesidades de la institución, se observa un mejoramiento en el recaudo (...)”.

Igualmente, explica que hay reuniones acordadas para los pagos de Medimás, la Secretaría de Salud, Salud Vida, Pijaos Salud, Nueva EPS y Asmetsalud.

“El hospital durante la medida de intervención ha presentado los avances necesarios en las áreas asistencial, administrativa y financieras para lograr la estabilización de la operación (...)”.

Otro concepto de favorabilidad que se sumó, es el de la Superintendencia Delegada para las Medidas Especiales en el que se concluye que la entidad “logró subsanar la mayoría de hallazgos de carácter administrativo, financiero y técnico científico que dieron origen a la medida”.

Y se resalta que se encuentra al día con el pago de salarios, seguridad social, aportes parafiscales y pago de honorarios a contratistas.

El aumento de la facturación en un 105% pues se pasó de $5 mil 653 millones en 2014 a $11 mil 616 millones a marzo de este año.

Defensa jurídica

 Un hecho especifico que se aborda en la resolución, es la solicitud que hizo la Gobernación de extender el tiempo para gestionar recursos para apoyar la gestión del hospital “y mitigar el riesgo de embargo al momento del levantamiento de la medida y poder constituir un depósito judicial para el proceso ejecutivo de JD suministros, el cual es de $3 mil 356 millones”.

Sobre este caso, se indica que está en etapa procesal y que el cálculo de los intereses a marzo de este año es de $5 mil 794 millones. De otra parte, se recuerda que el ente territorial está gestionando el financiamiento para la reposición de equipos por un valor de mil 395 millones, inversión que se hará según compromiso del gobernador Óscar Barreto con el Ministerio de Salud y el Presidente de la República. 

Se escuchará oferta de compra de la sede El Limonar

 La agente interventora, dijo que la venta de la edificación sigue en proceso, igualmente, que el contrato con la Central de Inversiones S.A., Cisa, está vigente hasta noviembre de 2019 y que se constituirá un fideicomiso patrimonial con el producto del negocio.

Y justamente, sobre este tema, habló recientemente el presidente de la Asamblea, Julián Gómez, quien manifestó que en las sesiones ordinarias que efectuará la Duma, se dará la presentación y socialización de una firma de médicos de Estados Unidos que se encuentra interesado en adquirir el hospital Federico Lleras Acosta sede El Limonar, bien que es subastado por Cisa, por un monto de $70 mil 236 millones.

El diputado afirmó: “Tenemos una invitación de unos médicos de Estados Unidos que van a hacer una propuesta para mirar la clínica de El Limonar, estarán el próximo martes a las 8:30 de la mañana. Es un médico, el doctor Barrera, quien es muy reconocido en el departamento y en la ciudad, ellos vienen a hacernos una propuesta, nos han pedido el espacio para socializar lo que sería la compra y de lo que ellos piensan que se puede hacer con esta clínica”.

EL NUEVO DÍA indagó sobre quién es el médico Barrera, persona interesada en acercar a los inversionistas norteamericanos para que adquieran el inmueble ubicado en la carrera Quinta entre calles 56 y 58; y conoció que se trataría del polémico exconcejal Jaime Barrera Galeano, ciudadano colombo-israelí y quien aparentemente reside en Raanana (Israel).

Así como lo registró el periódico de los tolimenses en su edición impresa del 24 de noviembre de 2010, Barrera ha estado envuelto en diferentes escándalos en Ibagué. El primero de ellos sucedió en 2007, cuando la Personería de Ibagué denunció que su ONG promovió que se le quitara el nombre de Nelsy García Ocampo a la institución educativa del barrio El Libertador, en medio de hechos poco claros en que según el órgano del ministerio público participaron dos rabinos mesiánicos, de origen latinoamericano.

Posteriormente, se conoció que Jaime Barrera se había apoderado del quirófano del hospital público San Francisco de Ibagué, mediante un convenio, para practicar cirugías, entre ellas estéticas, sin que recibiera la entidad de salud mayores ganancias por dichos procedimientos.

Después, el diario El Tiempo reseñó en abril de 2010 la estafa al ciudadano israelí, Taisir Mahajne, quien pagó $200 millones por un trasplante de riñón en Bogotá, siendo Jaime Barrera y su Corporación el contacto en Colombia, pero el procedimiento nunca se lo practicaron. El hecho lo investigó luego el programa “Séptimo Día” en una serie llamada “Turismo de órganos” emitida los días 3 y 10 de octubre del mismo año.

El último episodio fue dedicado a Jaime Barrera y la triste historia de Taysir Mahajne, a quien el médico ibaguereño no le quiere devolver el dinero que le entregó.