Hospital Federico Lleras en el primer semestre ofertó más de 100 vacantes temporales

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
A través de cuatro convocatorias internas que generaron críticas, se ofertaron 139 empleos para la planta temporal, aunque varios extrabajadores se presentaron, la calificación no les alcanzó para regresar.

Luego de conocerse los resultados que dejó el concurso de méritos de la Comisión Nacional del Servicio Civil 2016 en el hospital Federico Lleras Acosta a comienzos de este año, proceso que generó un despido masivo en diferentes áreas, surgieron varios cuestionamientos de por qué la entidad adelantó durante el primer semestre cuatro convocatorias para ofertar 139 vacantes en la planta temporal.

El hecho fue visto como un “desgaste administrativo y un aumento del costo de los gastos en la contratación”, por algunas personas cercanas a la entidad que pidieron reservar su nombre.

Esto, teniendo en cuenta que en la entidad existen tres plantas de personal: la global, una temporal y de supernumerarios, modalidades que a 2018 sumaban 990 funcionarios.

En una denuncia hecha a esta redacción, se relacionan los casos puntuales que dejarían en duda la transparencia del proceso.

 

Experiencia no les alcanzó

Entre los hechos expuestos está que a las convocatorias se presentaron extrabajadores que contaban con el perfil y la experiencia laboral de hasta 20 años, no obstante, no les fue suficiente para ser vinculados.

Asimismo, existirían casos en los que en un concurso el postulante obtuvo un puntaje bajo y en segundo intento con la misma información laboral sí alcanzó el cargo, también hay situaciones en las que fue mayor la calificación del personal nuevo que el antiguo.

“El hecho de que los auxiliares hayan sido declarados insubsistentes por el concurso de méritos después de 20 y más años de experiencia en el cargo (y) ahora no cumplen con los requisitos, no justifica que personas completamente nuevas o con tres meses de antigüedad en el hospital sí cumplan”, se precisa en la denuncia.

 

¿Cruce de cargos?

Otra de las denuncias es que en 2018 se creó en la planta global el cargo profesional especializado área de salud asignado a la Unidad Funcional de Ambulatorios, puesto que terminó siendo ocupado por la esposa de la persona que por la época, estaba asignado a la Unidad Funcional de Internación Médica, es decir, que existía un vínculo familiar que no fue tenido en cuenta por el nominador, dicen los denunciantes.

Luego, las dos personas se presentaron a un concurso de méritos, el cual ubicó al hombre en el puesto cinco y a la mujer en el tercero de la lista de elegibles, para el empleo de carrera denominado Profesional Especializado Área Salud.

Sin embargo, la profesional finalmente fue asignada a la Unidad Funcional de Internación Médica, es decir, que quedó en el cargo que era ejercido por su esposo, en esta situación la pregunta es si había una lista de elegibles, ¿qué sucedió con las personas que estaban en los primeros lugares?.

De la misma forma, se denuncia que a nivel interno se estarían utilizando influencias para favorecer a los familiares que participan en las convocatorias y lograr que se queden con los empleos a los que se postulan.

 

¿Qué dice la delegada de la Supersalud?

Ante estas denuncias EL NUEVO DÍA habló con la gerente interventora del hospital Federico Lleras Acosta, Inés Loaiza, quien explicó que todos los procesos se han adelantado dentro de la normatividad; asimismo, que las convocatorias internas están reguladas y tienen una forma estándar para evaluar las hojas de vida y que se le da un puntaje adicional a quien haya trabajado en la institución.

“El concurso de méritos (del Cnsc) era para la planta definitiva, muchos de los que estaban trabajando en el hospital (es decir) más de 70 que estaban en la planta temporal, pasaron y con ello (llegaron) a la planta definitiva, quedaron esas vacantes y había que proveerlos a través de un concurso, el del hospital”.

Añadió que las vacantes fueron reportadas a Función Pública, entidad que envió un listado de elegibles para revisar “que en esa lista de elegibles no hubiera personas que pudieran acceder a esos cargos”.

Al no encontrar el perfil o el interesado por el salario que se ofertaba “ahí nosotros hacíamos la oferta pública”. Loaiza dijo que se hizo por fases, teniendo en cuenta que se debía buscar a todos los posibles elegibles, para así poder adelantar las convocatorias.

Reiteró que en el ‘Federico Lleras’ se maneja una planta definitiva y una temporal, “en este momento está prácticamente todo el personal que tiene que estar”; no obstante, en algunos se mantiene el personal provisional mientras llegan los titulares.

En cuanto al recurso establecido para esta contratación, la gerente interventora precisó que quedó establecido desde diciembre de 2018, mes en el que se define el costo total del personal para un año, incluido los supernumerarios que es variable.

En cantidad lo que entregaría la Supersalud a la Gobernación del Tolima, una vez finalice la intervención son 313 empleados de planta y 644 en temporalidad.

 

Proceso evaluatorio

En lo relacionado con el comité que evalúa las convocatorias, Loaiza dijo que ella no hace parte del mismo, también, que aunque está conformado por varios funcionarios, este se divide por áreas y son los coordinadores quienes revisan las hojas de vida de los postulantes.

“Realmente no tengo acceso a ninguna parte del proceso porque soy nominadora, entonces no puedo participar en la selección, no tengo realmente conocimiento ni de quién se presenta ni quién pasa hasta que no me llegan para la nominación, no puedo tener el control de eso”.

Y sobre las diferentes quejas que se han derivado de las convocatorias en donde se señala posibles influencias, la funcionaria dijo que están siendo revisadas internamente y aclaró que la normatividad precisa que la prohibición en temas de parentesco y grados de consanguinidad recae en los nominadores.

Con respecto al caso de los esposos, la gerente dijo que el cargo denominado profesional especializado área de salud asignado a la Unidad Funcional de Ambulatorios, existía desde hace tiempo y que en su momento quedó vacante, por lo que se designó a la esposa del funcionario que estaba en provisionalidad.

Después de la convocatoria, llegó el titular del cargo que era desempeñado por el funcionario por lo que salió y fue vinculado para manejar un proceso de riesgo en el hospital, mientras se presenta a concurso nuevamente.

En cuanto a que la esposa, que quedó en el tercer lugar, luego fue asignada provisionalmente, Loaiza explicó que se hizo porque la titular del cargo no aceptó, al llamar al segundo de la lista pidió tiempo para posesionarse, plazo que se vence este mes, “¿qué son esposos?, yo los encontré ahí cuando llegué”.

 

Tutelas

Con los despidos masivos, en su momento se anunció una ola de tutelas en contra de la entidad, según la gerente finalmente se interpusieron 26 que en decisión de segunda instancia salieron a favor del Federico Lleras.

Hubo “dos de reintegro condicionado, qué quiere decir, que cuando llegue a existir una vacante debemos tenerlos en cuenta, hemos contestado que todos los puestos están ocupados, nos hicieron desacato, pero igualmente el juez fallo a favor de nosotros, porque no nos puede obligar a lo imposible”.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios