En la actualidad, el Tolima cuenta solamente con tres plantas de beneficio animal en la categoría de autoconsumo que registran un avance del 50% en el cumplimiento del decreto 1500 de Invima y pueden seguir operando. Estas se ubican en Icononzo, Cajamarca y Líbano.

El balance muestra que en gran parte de la región no se tiene control sobre el tipo de ganado que se está sacrificando y cómo se está haciendo.

El hecho fue calificado por el secretario de Desarrollo Agropecuario del Tolima, José Edgar Bonilla, como preocupante, pues hay riesgos para la salud y se le suma la problemática en seguridad con el aumento del abigeato.

“Nadie tiene un control en los diferentes municipios de qué tipo de ganado se está sacrificando, estamos regresando, es decir, el decreto 1500 nos ha llevado a un retroceso”, comentó.

El seguimiento en los municipios ha sido constante, asimismo, se han hecho mesas de trabajo junto a delegados de los ministerios de Agricultura, Ambiente, Transporte, Invima, entre otros, para evaluar a los entes territoriales y precisar quiénes están cumpliendo.

En cifras los avances son en Icononzo un 54%, Cajamarca 53,3% y Líbano 51,7%. En el caso de esta última población se tenía gran intranquilidad por el posible cierre del sacrificio de cerdos.

A raíz de esto, “convocamos a otra mesa para mirar el caso de Líbano y creo que estamos llegando a unos acuerdos muy importantes (que van a permitir) que atienda prácticamente todo el norte del Tolima en el sacrificio porcino y bovino”, explicó Bonilla.

De dichas reuniones quedó acordado que el Invima y la Gobernación, adelantarán una visita las primeras semanas de julio. De esa revisión depende la autorización para que sigan operando.

Del visto bueno dependen que en Ambalema, Anzoátegui, Armero - Guayabal, Lérida, Murillo, Piedras, Santa Isabel, Venadillo y Villahermosa, tengan un lugar para sacrificar que cumpla con la normatividad.

Panorama regional

El funcionario comentó que en el caso de Carlima en Ibagué que proyecta ser de categoría nacional hay un 8,75% de avance, al igual que, el Espinal. Purificación lleva 8% de cumplimiento, Chaparral 5% y Mariquita 43%.

Y en ‘Puri’ “en las dos mesas que hemos realizado no tenemos ningún avance, lo que nosotros nos dimos cuenta a nivel nacional es que únicamente tiene un progreso del 8% y no ha presentado ningún soporte documental o estudio de prefactibilidad”.

En el sur, Planadas está buscando una posibilidad para que el Invima y Cortolima evalúen el avance de las obras, pues su ubicación geográfica le genera pocas posibilidades para apoyarse con otras poblaciones.

“No hay recursos económicos suficientes, pero sí un sacrificio de ganado muy alto en todas la veredas.

“Estamos solicitando un trato especial para que en lugar que se esté sacrificando sin ningún control y aumente el abigeato, se reabra la planta de sacrificio bajo ciertas condiciones”.

Bonilla opinó que la solución en este tema es presupuestal y los municipios no cuentan con suficientes recursos, “en vez de dar una solución se ocasionó un problema”.