Como José Ómar Cardeño Olivares fue identificado el médico cirujano que operaba junto con su compañera sentimental, una clínica de abortos clandestina en Ibagué.

Cardeño, quien fue sorprendido por servidores del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, instantes en el que se disponía a practicar un aborto a una joven de 21 años, fue capturado en flagrancia y deberá afrontar un proceso judicial por este delito.
 
¿Cómo los cogieron?
El pasado martes, a través de una orden de allanamiento  ordenada por la Fiscalía Séptima, hombres del CTI llegaron hasta el apartamento 402 bloque Tres del conjunto residencial Las Margaritas y el panorama no fue nada alentador.
 Gina Lizeth Cárdenas, de 21 años, fue encontrada en la cama del médico Cardeño cuando estaba a punto de abortar a su hijo de ocho semanas.

 Unos baldes con agua, un plástico negro para no manchar las sábanas y uno cuantos instrumentos para el procedimiento fue el panorama en la habitación del apartamento 402, según fuentes extraoficiales.
 El médico cirujano inscrito a la Secretaría de Salud estaba acompañado de Yina Patricia López Ángel, su pareja sentimental y quien, al parecer, era la encargada de buscar las clientes.

 En el allanamiento, los servidores incautaron algunos elementos con los que se realizaban los abortos, como un espéculo, baldes, pinzas dilatadoras y de cuello, y algunas sustancias para evitar la infección.

Así operaban
De acuerdo con información oficial, el modus operandi de este médico clandestino de abortos era que por intermedio de su esposa contactaba a mujeres que tuvieran entre seis y ocho semanas de gestación.

López Ángel entregaba un número de celular y luego las citaba en el apartamento donde funcionaba la clínica.
Según las investigaciones, la mujer era la encargada de hacer la negociación y cobrar una suma de 300 mil pesos por procedimiento.

En audiencia
Ante un juez de garantías fueron presentados José Ómar Cardeño y Yina Patricia López Ángel, quienes deberán afrontar una investigación por el delito de aborto.

Pese a su captura en flagrancia, la pareja de esposos fue puesta en libertad,  pero el proceso continuará. En cuanto a la joven de 21 años, ella también será puesta a disposición de las autoridades por incurrir en este delito.