Tranquilo, Bobby
A muchos nos dio una sirimba ese jueves en la mañana tras la pomposa rueda de prensa con la que se cortó el listón oficial de los diálogos de paz. No era para menos, pues no estábamos preparados para muchos eventos que allí sucedieron. Caímos redondos como una guanábana frente a nuestros televisores, será la presión de una paz lejana que añoramos a rabiar o a Colombia se le subió la bilirrubina.