PUBLICIDAD
Ya se volvió hasta incómodo encontrarse con un candidato en un lugar público o buscar un espacio para escuchar sus propuestas, porque en estos tiempos de Instagram, Facebook, WhatsApp y Tick Tock, cualquiera que le llegue a tomar una foto y la publique, activa las discusiones o polémicas, al punto que lleva a que candidatos o sus equipos le llamen reprochando.
Este estúpido juego no se debería permitir y así como la democracia permite elegir libremente, los candidatos deben entender que la mejor forma de saber si sus propuestas son buenas, es comparándolas con las de los demás. O, ¿es que les da temor que puedan conocer otras opciones?
La reflexión acá es que ganen las propuestas, las mejores alternativas, la transparencia y, por supuesto, la ciudad. No nos dejemos meter en el juego que "si no estás conmigo, estás contra mí". Lo anterior va para los candidatos, pero también para los ciudadanos que los siguen y hacen de la actividad política una contienda que lo único que lleva es a polarizar la población y afectar el desarrollo de la ciudad.
Comentarios