Me la juego por la paz, así no crea en Santos –no voy a ser el primero en cogerlo diciendo una verdad– y me tomo otro chirrincho pa que comencemos a arreglar esta joda. Pero me da el mío pa soltar la lengua que no suelta las pendejadas con que justifican el porqué nos tienen como nos tienen. Vengo con el motor prendido y arranco.

Nos tienen jodidos por pendejos. Nos pisan los callos y pedimos perdón por no sacar la pata a tiempo. Damos las gracias por el madrazo, la planera y la quemada del rancho. Eso lo sabemos –venga otro guarilaque- y solo hablamos paja con tragos. Pa qué nos quejamos si seguimos votando por los mismos y entre más ladrones sean más votos sacan. No me vengan con el cuento que se ponen los calzoncillos del nieto llenos de alfileres y después se quejan porque no las pueden acomodar. Arranquemos por el pueblo y me tomo otro. Aquí como en Ibagué pariendo por agua, todo el mundo talando y haciendo quemas, la explotación minera acabando hasta con el nido de quienes quieren acabar con Cajamarca y volver un desierto el sur oriente del Tolima.

Los alcaldes roban a cuatro manos y les dan juete al que no piensa como ellos, los secretarios ni rebuznan, los del cuento de la cultura esperan ser alfabetizados por decreto. Un estercolero de varias hectáreas. Se tiraron hasta las fiestas. Las traquetearon, las comercializaron y las llenaron de putas y ladrones. Tómese otro antes de que se ponga a llorar por Plana Llana, donde a veces iba un cura a predicar sobre la virginidad.

Pare el cuento pendejo, que así como nos tocaron curas que armaban pájaros también nos dieron la mano unos que defendían y ayudaban a los pobres. Otra ronda para volver al principio. Si un campesino se roba un animal es condenado por abigeato y si un potentado manda a asesinar para robar tierra y ganado es tratado como un empresario respetable y un político con futuro. Si es condenado por criminal tiene electorado seguro. Cuando éramos culicagaos, solamente robaban los ladrones y la plata se hacía trabajando.

Ahora un exalcalde con tierras y condenado por pícaro se declara desplazado pa recibir par fincas de las que el gobierno le quito a los narcos. Esas son vainas de la refundación. Y esa joda qué es? Lo que nos faltaba. Un pendejo que no escucha radio y que no se acuerda que cuando el pueblo lo controlaban los paracos, a todos nos tocó pagarles cuotas. Por eso es que tenemos el congreso que tenemos y los gobernantes que soportamos. Nosotros aquí produciendo abono orgánico y el país jodido. Aunque en Ibagué las cosas marchan a las mil maravillas.

La remodelación del Panóptico se paraliza para organizar en el centro penitenciario el espacio para sus egresados, celdas especiales para los que han robado con la remodelación y un coso para los sin enjalma que no han logrado entender lo que es patrimonio histórico y la importancia de la cultura. Allí, Carlima contamina y su gerente en vez de tomar medidas para no seguir jodiendo a los ibaguereños, sale a relinchar. Esperan que queden unos pesos y comprar los burros para sacar adelante el acueducto alterno, para arreglar las calles del centro y para costear los cupos en el coso para los aspirantes que se asoman.

Producen mucha risa, pero son una vergüenza. Y el pueblo qué? Sordo y ciego el pendejo, o es que está comprando de contrabando? No ve como estamos? El presidente nombra equipo para atender a los politiqueros, pero no las necesidades del país. Un superministro para favorecer su clientela. Combo para cortinear lo de Salucoop. Reformas pa que se fortalezcan en el poder los que duermen tranquilamente sobre tapetes de sangre. La justicia sobrada de corruptos. Aquí miente el que denuncia a un poderoso y la buena imagen de Colombia en el exterior, la da Ernesto Samper en Unasur, repartiendo camisetas con el letrero 8.000: honestidad y transparencia. Y mientras hablábamos paja me robaron el caballo que tenía amarrado afuera pa que me llevara a donde golpean duro. Deme par botellas que nos tiene cogidos de las aquellas y esto no tiene arreglo.

Ñapa: Si los comerciantes de la violencia devuelven lo robado desde 1930, por dar una fecha, el país se sobraría de plata y muchos perderían su honorabilidad.