La paz es una conquista y no una herencia

María Yolanda Jaramillo G.

Cualquier acción y movimiento terrorista, lleva a desestabilizar a quien golpea; desestabilizar significa conducir a los otros a un estado de total indefensión.

“Así sucedió a las 9:30 del jueves 17, el poder criminal irrumpió en la Escuela de Cadetes Francisco de Paula Santander, ocasionando el peor ataque terrorista de los últimos años”. Tres días después el Eln, admitió su responsabilidad de los hechos, como ya lo habían señalado las investigaciones. Este acto terrorista dejó 20 cadetes muertos y más de 70 heridos. Ante la gravedad de los hechos, el presidente Iván Duque le solicita al gobierno cubano, anfitrión de la mesa de diálogo, que le entregue a los 10 jefes guerrilleros de la mesa de negociación, para ser llevados a la justicia. El gobierno cubano manifiesta su lealtad a los protocolos acordados con el gobierno anterior y el Eln, en caso de una ruptura de la negociación, lo cual, les permite ser trasladados con todas las garantías de seguridad a un sitio de la geografía nacional; dando así por terminada la mesa de negociaciones. La decisión de la Presidencia, de ser llevados a la justicia recibe el respaldo de la ONU, a través, de su Consejo de Seguridad, que pide sean sometidos a las resoluciones pertinentes, de las normas internacionales de seguridad. Chile como país garante igualmente apoya esta decisión. El gobierno colombiano, se enfrenta a un gran dilema: cumplir el protocolo establecido en la mesa de negociación, o enjuiciar a los responsables por el acto terrorista. Mi pregunta sería cuál es la decisión ¿políticamente correcta?, hablando en términos popular, tradicional y como postura ideológica, se debe utilizar el sentido común; más aún cuando creemos que la Paz es una conquista y no una herencia… recordemos el culpable que desencadenó la segunda guerra mundial se llamaba Hitler, cuando se inició la guerra todos los países aliados se unieron y atacaron con violencia la violencia –obraron justamente– pero eso no quita el costo de miles de millones de víctimas. Lo políticamente correcto, era que Hitler no lo hubiera provocado… el Presidente Duque y su gobierno tienen la posibilidad de conducir un destino para Colombia, con su propio estilo; “hacer de Colombia un Estado Social de Derecho”, estableciendo un mecanismo Institucional de Control Social y Político, que aminorara las contradicciones sociales y se cumpliera la constitución política de 1991, con el proceso de la intervención del Estado Social de Derecho, Art. 2 “mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo”… al Presidente se le da una oportunidad muy grande, que le permitiría estatuir como Política de Estado los Acuerdos, lo cual, le daría un gran liderazgo en el proceso de la Paz.

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