Democracias asediadas

Nelson Germán Sánchez

Aunque el título podría sonar un poco fuerte, creo que recoge muy bien una preocupación latente entre ciertos organismos, agremiaciones y asociaciones de la sociedad civil en Colombia y América Latina que ven como las democracias son asediadas.
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Precisamente ese fue el título del Tercer Seminario Internacional que organizó la Misión de Observación Electoral con el apoyo de Suecia Sverige, Open Society Foundations, Konrad Adenauer Stiftung, Fondo Multidonante de las Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz, Caritas Colombia y National Endowment For Democracy, con el propósito de generar una diálogo reflexivo y controversial sobre distintos temas que llaman a pensar en la importancia de entender, fortalecer y analizar las democracias, más allá de la confusión que se tiene de ella como la acción de elegir a través del voto a dignatarios nacionales o locales.

Por eso, la importancia de poder compararnos y controvertir con expertos de países como El Salvador, con Óscar Martínez, periodista independiente, y entender cómo es informar bajo un régimen casi absolutista; igualmente, hacerlo con la mexicana Pamela San Martín Ríos y Valles, sobre la mirada de las elecciones en la era digital. O escuchar a Fernando Atusta, del Perú, frente a la realidad de su país entre la polarización y la inestabilidad institucional o a Eduardo Núñez, de Guatemala, sobre la urgencia de una nueva agenda de reformas democráticas en América Latina.

Pero, además, el papel preponderante de los medios de información, redes sociales y el periodismo en toda esta coyuntura del llamado asedio a las democracias, disertando sobre ello en mesas de controversia para conocer precisamente sobre como volver los medios de comunicación y las redes sociales herramientas democratizadoras; así como entender la violencia como factor desestabilizador de la democracia y cómo influyen las nuevas tecnologías en los procesos electorales. Igualmente, analizar el cómo la corrupción se ha vuelto el gran lastre para la democracia, pues niega el acceso igualitario al poder, impulsa la desviación de recursos, estanca el desarrollo de los países y ello impacta negativamente y directamente sobre los derechos humanos al no poder generar bienestar general o permitir a la gran mayoría de habitantes de un país acceder a ciertos bienes y servicios básicos.

Igualmente, ver más allá de las noticias falsas, fact checking y las trends de Tik-tok para tratar de entender desde algún punto la verdad política en las redes sociales para las democracias; de la misma manera focalizar el análisis en el caso colombiano y la incansable búsqueda de la paz, así como contar con un espacio para generar discusión sobre las debilidades institucionales en América Latina frente a los populismos y autoritarismos crecientes. También, poder entender la efectividad de las acciones afirmativas como mecanismo de inclusión y representación política.

Pero, además de lo anterior, este seminario sirvió para tratar de entender el ecosistema digital y las comunidades que allí se crean que se volvieron  una especie de burbujas o cámaras de eco, que nos vuelven sociedades fragmentadas, las cuales solo nos permiten acercarnos, informarnos o consumir lo que nos interesa, es de nuestra ideología, creencia o gusto, lo que nos da una sola mirada de la realidad, la verdad o nos hace sentir cómodos, excluyendo todo lo demás y creando radicalismos.

 Es decir, toda una visión de los desafíos que enfrenta la democracia desde la óptica de la  información, los medios de comunicación, las redes sociales y sus contenidos y la labor de los periodistas en ellas, frente a ese asedio cada vez más refinado.

Nelson Germán Sánchez Pérez –Gersan-

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