Hace 18 años, cuando se formuló por primera vez el Plan de Ordenamiento Territorial –POT–, se planteó que en esa hermosa herradura verde que abraza a Ibagué y que se conoce como los cerros tutelares, se podía pensar en una figura de conservación ambiental conocida como un Distrito de Manejo Integrado –DMI–, que abarcara la parte norte y la cuenca alta del río Chipalo.
Un DMI es una área protegida, debido a su importancia en la provisión de bienes y servicios ambientales y en la propuesta del –POT–, los cerros del norte de Ibagué se consideraron como el ecosistema estratégico del entorno urbano más importante por su enorme riqueza hídrica que permite el nacimiento de cuencas y microcuencas que abastecen de agua al menos a siete acueductos comunitarios de las comunas 2, 6 y 7 de Ibagué.
Esta figura de conservación es fundamental si recordáramos que en nuestro municipio hay más de 70.000 ibaguereños que aún acceden al agua de acueductos que manejan organizaciones comunitarias y no el Ibal.
En 2001, la Corporación Ambiente y Desarrollo, con el apoyo financiero del Fondo para la Acción Ambiental, la participación de instituciones gubernamentales y las organizaciones sociales de 10 veredas que empezaban en La Coqueta y terminaban en La Pedregosa, formularon el Plan de Manejo Ambiental de los Cerros del Norte, que formalmente ponía a consideración de Cortolima la propuesta de constituir ese Distrito de Manejo Integrado como opción en pro de la conservación y el mantenimiento de los recursos naturales de este territorio.
Desde ese año, esta propuesta estuvo flotando en el ambiente como una iniciativa que debería tener más importancia para Cortolima y para el municipio de Ibagué. En 2014, la Corporación Autónoma suscribe un convenio con la Universidad del Tolima para “…realizar los estudios tendientes a la identificación y caracterización en la zona del proceso de declaratoria de área protegida de los Cerros del Norte de Ibagué”, como resultado se determina que la figura a constituir era un Distrito de Conservación de Suelos.
Luego en 2015, Cortolima en convenio con la Universidad Cooperativa, trabaja en la ruta de la declaratoria de este distrito y se hacen estudios socio-económicos, sobre su biodiversidad, coberturas vegetales y sistemas productivos.
Con esta misma universidad se adelantó el diagnóstico de uso, ocupación y tenencia de la tierra a nivel predial como insumos para la formulación de un Plan de Manejo de este Distrito de Conservación de Suelos.
En 2017, Cortolima en un nuevo convenio, esta vez con la Unión Temporal Desafío Ambiental, avanza en la formulación del Plan de Manejo del Distrito de Conservación de Suelos que permita entre otras cosas: 1) Proteger y conservar el recurso hídrico en calidad y cantidad; 2) Recuperar áreas de importancia ecológica para la conservación de la biodiversidad; 3) Diseñar y promover procesos de reconversión productiva, entre otros.
En total serán 9.130,49 hectáreas las que conforman este Distrito de Conservación de Suelos y abarcan veredas como: Villarrestrepo, El Retiro, La Plata Brillante, La Cascada, Ambalá parte alta, Ancón Tesorito partes baja y alta, Chembe, La Belleza, La Pedregosa, China Alta, para mencionar algunas de las más emblemáticas.
Esta área protegida se debe incluir en el nuevo POT de Ibagué y en el Pomca del río Totare, debe ser la hoja de ruta para que sigamos conservando el norte y las esperanzas de los campesinos que en siete programas y 23 proyectos, proponen las iniciativas que ellos consideran se deben ejecutar para mantener este ecosistema productor de bienes y servicios ambientales estratégico para la sostenibilidad de Ibagué y el centro del Tolima.
El drama ambiental que vivimos en el planeta, pone de presente que evitar la catástrofe que se nos avecina, requiere del concurso de todos. El Distrito de Conservación de Suelos vuelve a demostrar que los mejores guardianes de los recursos naturales son los campesinos y que ellos con el respaldo institucional gubernamental regional y nacional, la cooperación internacional y las organizaciones en pro de la defensa de la naturaleza podrán sacar adelante esta iniciativa.
En buena hora Cortolima retomó esta iniciativa y con ella contribuimos a aumentar las áreas de conservación en la región y el país.
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