Sin ánimo de parecer religiosos, dice un pasaje bíblico que de la abundancia del corazón habla la boca. Aquello pareció olvidar el líder evangélico Miguel Arrázola, pastor de la iglesia cristiana Ríos de Vida, ubicada en Cartagena, y la cual ha sido escenario de todo tipo de manifestaciones discriminatorias, ofensas y burlas en contra de personas que se han atrevido a cuestionar la forma en la que el pastor se aprovecha de la fe de la congregación, con el fin de recaudar grandes sumas de dinero para sus arcas personales. Aquello comprobado por varios acuciosos.
El famoso pastor del No, como ha sido llamado Arrázola gracias a su activismo político en el pasado plebiscito, recientemente se vio envuelto en un escándalo de proporciones mayores, a causa de sus polémicas declaraciones en contra del periodista Lucio Torres, quien se atrevió a denunciar los manejos que se le da al dinero que entra a dicha iglesia mediante ofrendas y diezmos.
Arrázola en medio del culto, y con la aprobación de sus fieles, luego de llamarle marica al periodista, profirió de manera disimulada una amenaza de muerte en su contra, haciendo alusión a uno de sus escoltas apodado Nigeria, y quien, en ocasiones anteriores, se ha visto involucrado en agresiones y atropellos, a fin de defender las posturas de su protegido. ¿En serio un pastor cristiano necesita escoltas?
Aunque en Colombia, el tema de las iglesias aún no está reglamentado, al menos en lo que tiene que ver con impuestos, y el pastor Arrázola mientras tanto pueda seguir ganándose su elevado sueldo solamente comparable con las absurdas cifras que gana un congresista colombiano, sí es necesario manifestar que aquella conducta viniendo de un supuesto líder cristiano, dista por completo de lo que la gente espera de un predicador del mensaje de Dios.
Bien pudiera traerse a colación, a algunas personas practicantes del cristianismo en el país, como el periodista Darío Silva Silva, fundador de la iglesia Casa Sobre la Roca, el ex futbolista Silvano Espíndola, el actor y cantante Moisés Angulo, el comediante José Ordoñez, y el mismo Falcao.
Todos ellos comparten la misma visión cristiana del supuesto pastor Arrázola, e incluso todos, a excepción del Falcao, desde hace un buen tiempo comparten la enseñanza de la biblia desde los púlpitos, demostrando una conducta intachable. Por sus frutos los conoceréis, también dice la biblia para referirse a quien se supone sigue un estilo de vida cristiano que debe notarse en su forma coherente de vivir de acuerdo a lo que reza su boca.
Tal parece que el pastor Miguel Arrázola, su esposa Paula, quien también ha dejado ver su ira y su soberbia, además de enriquecerse y viajar por el mundo con dineros de la iglesia, estarían aprovechando su posición y por supuesto los diezmos para una próxima aspiración política en la ciudad de Cartagena.
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