Cede el desempleo, pero no lo suficiente

El desempleo en Ibagué bajó cuatro puntos en el trimestre julio-septiembre (14,1%), en comparación con el mismo periodo del año pasado cuando fue de 18,1%, según reportó el DANE. Es decir que hay 10.000 empleados más que el año pasado.


No obstante, esta capital continúa como la segunda, de las 23 analizadas, con más desempleo, después de Quibdó, que tiene un índice de 22,7%, y aún está lejos de llegar al promedio nacional que se mantiene en un dígito (9,4%). Las ciudades con menor desempleo fueron Bucaramanga y Santa Marta con 7,9%; les siguen Medellín y Manizales con 8,7%. El total nacional representa una disminución de 1,4% y 450.000 personas más que se emplearon.

Las mujeres siguen siendo las más afectadas por el desempleo: en el trimestre analizado la tasa de desocupación fue de 11,6% para las mujeres y de 7,7% para los hombres. La informalidad en septiembre se ubicó en 56,1%. Aunque disminuyó con respecto a 2022, cuando estuvo en 58,7%, todavía es muy alta, porque indica que más de la mitad de la población que trabaja no cuenta con los beneficios de la seguridad social.

La actividad económica de Ibagué es altamente dependiente del comercio y así lo ratifican las cifras. El mayor número de puestos de trabajo los aporta el comercio, ya que cerca de 40.000, de las 192.000 personas empleadas, laboran en este sector. Otro gran demandante de mano de obra es la administración pública con 35.000 puestos de trabajo; en tercer lugar, se encuentran las actividades profesionales y las actividades artísticas, con 19.000 empleos, cada una. La actividad constructora cayó y pasó de generar 20.000 empleos en el trimestre julio-septiembre de 2022 a 15.000 en el mismo periodo de este año.

Muy posiblemente en el repunte del empleo incidieron los eventos culturales y deportivos que se programaron en septiembre, que fueron muy atractivos y consiguieron que llegara un buen número de turistas. Más recientemente, la celebración del Día de los niños también logró reactivar el comercio, o por lo menos así se percibió en los centros comerciales y en las calles con la gran afluencia de personas. Ahora se espera que la temporada decembrina contribuya a dinamizar aún más la economía.

Sin embargo, se requieren estrategias de largo aliento para que, además de incrementar el número de empleos, estos sean de calidad y formales, retos que tendrá que enfrentar la nueva alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda.

 

 

El Nuevo Día

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