Un sueño cumplido, que ni siquiera la diferencia de lenguajes truncó, es el balance de la gira que efectuó la semana pasada la Orquesta Sinfónica Juvenil del Conservatorio del Tolima por las Cataratas de Iguazú, en el Festival Iguazú en Concierto.

Su directora, la maestra Tatiana Cecilia Arias, califica como una experiencia maravillosa esta oportunidad, en la que “quedó en alto nuestro nombre musical. Este encuentro sirvió mucho para mostrar lo que hacemos aquí en el Conservatorio, con la música que llevamos”.

Fueron siete días de presencia en dicho encuentro de culturas, en el que la premisa fue hacer “que a través de la música nos entendamos. Algunos niños hablaban francés, otros español y otros inglés, pero la música es el lenguaje universal y así nos hicimos entender”, dice.

Colombia fue emoción

A pesar de las fronteras, la integración de los más de 800 niños funcionó debido a ese criterio, aunque, confiesa la maestra, “se buscó que ellos sintieran nuestra música y se hizo un trabajo a través de los niños de percusión; todos empezaron a bailar y se logró un buen trabajo”.

Arias Camacho relata que “pensé ‘va a ser muy diferente pararme y mover los brazos, porque tocar la música colombiana requiere de algo más, del ritmo que nosotros tenemos’, pero me puse de acuerdo con percusión y piano y los hice bailar”.

Otra de sus satisfacciones radica en que vio cómo “el colombiano es muy querido por la simpatía. Todo el mundo quería compartir con nosotros y nos invitaban; también fuimos declarados los más simpáticos y puntuales.

“Queremos demostrar que los buenos somos más, y que si se trabaja en equipo y se quiere hacer las cosas, se puede obtener los logros y ganar mucho más. Fue un trabajo entre los padres y el Conservatorio: así se tuvo este buen resultado”, añade.

Por último, resalta con orgullo que a partir de esa participación su agrupación tiene invitaciones a “Perú, Argentina y Zimbabwe. Dios quiera que se puedan lograr. Vamos a hacer todo lo posible para poder asistir”.

Participación con puertas al exterior

 El rector (e) del Conservatorio, James Fernández, calificó este esfuerzo como el “primer paso gigante del Conservatorio en proyección internacional”, que fue posible “gracias a la labor inmensísima de cada padre. Significó posicionamiento internacional, ya que fue apoteósico”.

Y agregó que, como resultado, estará la inminente y próxima firma de un convenio con la Universidad de Tucumán, en Argentina, que recaerá en ventajas para la tecnología en Luthería, así como para la circulación artística de docentes y alumnos del plantel.

Lo anterior, además del convenio existente con la Universidad Nacional, en algo que se va subsanando mediante la venta de servicios “y recursos propios muy pequeños, pero la apuesta es invertir en asuntos muy fructíferos para el Conservatorio”.

“Este año contamos en que esté superado el tema de funcionamiento, gracias a la voluntad de la Asamblea y la Gobernación, eso va a dar a posibilidad de tener un apoyo más grande”, sostuvo. 

Hablan embajadores del “sueño cumplido” en las Cataratas

Óscar Torres (piano)

“Una experiencia enriquecedora al ciento por ciento, por lo musical de alto nivel y el encuentro con otras personas de otras partes. La alegría de la música nos unió a todos”.

Olga Lucía Vargas (madre)

“Me siento muy agradecida con Dios y el Conservatorio que aunó esfuerzos con nosotros para un evento tan maravilloso. Es todo un esfuerzo, pero que se siente la gratitud del sueño cumplido”.