Isidro Rodríguez Herrán presentó renuncia irrevocable a la presidencia del Concejo de Cunday. El Alcalde del Municipio asegura desconocer la carta, y que esta noticia lo tomó por sorpresa.

En la renuncia, el cabildante deja claro que se hace a un lado del cargo que ostenta desde el 2 de enero del año en curso, más no de la curul.

Según argumenta en la misiva, dirigida a la Mesa Directiva de la Corporación, los motivos de su renuncia son estrictamente relacionados con el cargo, “debido a que no existen las garantías suficientes para seguir ejerciendo como Presidente”.

Además, señala que lo motivó la “falta de compromiso de la Administración Municipal”, de los “mismos compañeros de la Mesa y algunos concejales”, así como la carencia de “ejercer control político en la Administración”.

El concejal Herrán, de Alianza Social Independiente, ASI, también menciona que entre los inconvenientes que conllevaron a su dimisión se encuentran que a la fecha los concejales no cuentan con las pólizas de seguros de vida, y que en “ningún momento hubo acto administrativo o proyecto de acuerdo a iniciativa del Alcalde de ajustar el presupuesto con fundamento jurídico”.

De esta situación que generó una crisis en la Corporación, menciona, se enteró en comunicación verbal con el burgoamestre, en julio pasado, cuando “ya se había realizado la contratación para el buen funcionamiento” del Cabildo, “a pesar de que fui austero en el manejo del presupuesto”.

Sobre el particular, EL NUEVO DÍA habló con el mandatario de Cunday, Evelio Girón Molina, quien manifestó que tiene entendido que la renuncia del Presidente aún no ha sido aceptada. De hacerlo, en este caso como faltan dos periodos, la Mesa Directiva deberá hacer un acto administrativo en el que asuma esta dignidad el primer vicepresidente Fabio Alarcón.

“No puedo violar la ley”

El alcalde Evelio Girón Molina, explicó que enterarse de la renuncia del Presidente lo dejó “frío”, aunque conocía de antemano que este estaba incómodo porque había adquirido unos compromisos con un presupuesto que sobre la marcha le tocó reducir.

De acuerdo con la máxima autoridad de Cunday, el Concejo Municipal afronta una dificultad presupuestal, en razón a que en las vigencias 2014, 2015 y 2016 el presupuesto de funcionamiento que se aprobó estuvo sobredimensionado.

Lo anterior generó que de millón 600 mil pesos que en promedio le giraba el Municipio se pasara a 980 mil pesos mensuales, dejando a la Corporación “prácticamente” sin cómo funcionar, por dar cumplimiento a la Ley 617 de 1994 que se había dejado de cumplir.

De no corregirse el error “el Municipio podría estar incurso en unas causales de desaparición”.

“Yo no puedo excederme en los límites de giros al Concejo como ya lo hicieron en 2014 y 2015.

Eso incomodó al Presidente un poco y de pronto perdió la visión del manejo del tema y prefirió pasar la carta y renunciar a su condición de Presidente”, agregó, a la vez que desvirtuó que los concejales estén sin pólizas de vida.

Según él, “estamos en un proceso contractual para la renovación de las mismas, pero estas están vigentes”.