Tras evidenciar los posibles trabajos sin concluir en la Fase Uno del Acueducto Complementario, proyecto que se ejecuta en el sector Coello - Cocora, dirigentes políticos piden a los organismos de control inspeccionar en detalle el estado de la obra, que fue entregada en octubre del año pasado por el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo.

En concreto, las dudas están centradas en conocer cómo la Administración logró conducir agua desde la bocatoma del río Cocora hasta el inicio de la segunda fase del proyecto, si para la fecha del acto de entrega, efectuado el 26 de octubre del año anterior, faltaba instalar aproximadamente 150 metros de tubería en un punto (PI-14) ubicado un kilómetro después de la bocatoma. Es decir, había un tramo sin conexión.

Para la representante Adriana Magali Matiz se trata de un hecho que debe ser revisado por los organismos de control a fin de dar claridad a la ciudadanía y la opinión pública. Al respecto, indicó: “Hago un llamado a los órganos de control del Municipio para que, ante las presuntas inconsistencias que se denuncian por la veeduría y la comunidad, se lleven a cabo las indagaciones pertinentes de la Personería, una auditoría especial inmediata de la Contraloría y se proceda a entregar un informe detallado de las obras”.

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En el mismo sentido y a través de una columna de opinión, el representante Ricardo Ferro dijo que la ciudad “necesita respuestas y no cortinas de humo”. Para el parlamentario, es vergonzoso el hecho de que existan dudas sobre si hubo un ‘falso positivo’ en la entrega de la fase Uno, mas aún cuando existe incertidumbre entre miles de ciudadanos del sur de la ciudad sobre el suministro del líquido a raíz del cambio a los diseños de la obra original, que en principio contemplaba proveer el agua a través de gravedad y no con motobombas.

Por otro lado, el concejal Camilo Delgado fue enfático en decir que solicitará a las contralorías Municipal y General que adelanten un pormenorizado análisis del proyecto. “Como cualquier ciudadano, solicitaremos que entren a hacer un examen exhaustivo y minucioso de cuáles son los verdaderos avances en cada una de las fases versus lo que se ha venido afirmando en eventos institucionales, esto teniendo en cuenta que es un proyecto que involucra recursos y una entidad de orden nacional (Findeter) que contrató las obras”, indicó el cabildante, quien además recordó que el Municipio contrató en 2017 la fase Dos sin que se haya garantizado la operatividad de las fases anteriores, principio definido en una resolución del Ministerio de Vivienda.

El diputado Jairo Forero se unió al pedido al asegurar que dada la importancia del proyecto para la ciudad, la Administración y Findeter, como entidad contratante, aclaren cuáles son las condiciones hoy por hoy de la obra.

En concreto, afirmó: “A estas alturas de la vida un pueblo no puede ser engañado injustificadamente por un gobernante por dar una obra de forma parcial. Queda en duda si se le está mintiendo a Ibagué o no (...) Findeter debe decir si se terminó la obra o solo fue un amague o una farsa”.

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Aclarando que desconoce en detalle las circunstancias en las que se ha desarrollado el proyecto, el diputado Jaime Ospina aseveró que “están las instancias de los organismos de control que son las competentes para que se puedan hacer las denuncias respectivas de ser cierto, que sería absolutamente irresponsable”.

Salen voces de respaldo

Entre varias cosas, el alcalde Jaramillo afirmó a través de Facebok, en su programa ‘Un café con Jaramillo’ que en el punto PI-14 hoy está instalada una tubería provisional a la espera de que culmine la construcción de un muro de contención que no estaba previsto en la fase Uno del proyecto, pero que, ante la pérdida de la banca, tuvo que ser priorizado como una obra complementaria. Jaramillo agregó que el muro es financiado con recursos propios de la Secretaría de Desarrollo Rural y estará terminado en julio próximo.

También dijo que hoy la bocatoma está desocupada porque en la actualidad el contratista avanza en la fase Dos del proyecto, pero el día de la entrega fue llenada para la demostración de que el líquido era transportado de principio a fin. “Cada 500 metros la tubería se fue probando antes de tener la tubería completa, pero cuando hicimos la prueba (26 de octubre) toda la tubería estaba llena”, afirmó.

Luego aseveró que invitará a las entidades de control para realizar una visita técnica a las obras.

Al ser consultado, el representante Ángel María Gaitán dio un espaldarazo al mandatario al decir que confía en su capacidad de trabajo y desestimó que hayan omisiones con el avance del proyecto.

“Más allá de que algunos opositores y enemigos digan que no han entregado, yo sí creo en la responsabilidad de un hombre como Guillermo Alfonso, que está trabajando con fundamentos y conceptos técnicos.

“Las obras tendrán que entregarse para que funcionen hoy y de 30 o 50 años, y no en función de los comentarios de algunos”, dijo.

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El concejal Ernesto Ortiz también dijo confiar en la gestión del mandatario frente al proyecto. “No le han mentido a la ciudad. Fui testigo fiel de cómo el agua salió cuando se abrió la llave. El Alcalde está trabajando para las próximas generaciones y no para las próximas elecciones”, comentó el cabildante.

Dato

El Ibal y Findeter invirtieron $12.500 millones para la fase Uno del proyecto. Además, el Municipio destinó $6.000 millones para construir un muro de contención en el punto donde no habría conexión, conocido técnicamente como PI-14.