Cambio de comportamiento

Jaime Eduardo Reyes

Una nueva clase de desplazamiento de personas está amenazando con presentarse en el departamento del Tolima. A los tradicionales desplazamientos de familias por causa de la guerra y los problemas económicos se está sumando una nueva modalidad de migración, la causada por el calentamiento global. Así como lo lee, personas del sur-oriente del departamento, en particular en Natagaima, están pensando en abandonar sus casas y buscar municipios menos calientes. Y es que este municipio es el que hasta ahora presenta las más altas temperaturas en todo el departamento.

¿Es posible que esto ocurra? Creo que sí. Parece exagerado, pero si se piensa con detalle, no lo es. La posibilidad de un aumento de las migraciones motivada por altas temperaturas es factible.

Piense en Juan, un jornalero, jefe de hogar, que sobrevive ofreciendo su mano de obra en fincas del municipio, desde muy joven trabaja en los campos de Natagaima, tiene mujer e hijos, los cuales no tienen mayores oportunidades para estudiar, tampoco de trabajar. Desde siempre Juan ha pensado en buscar otras posibilidades en otros municipios, pero no se ha ido por lo que los expertos llaman “arraigo territorial”. Sin embargo, la desertización de los campos, la disminución del agua de los ríos y sus consecuencias, y las elevadas temperaturas han mermado a cero sus opciones de ocupación.

Bajo estas condiciones de vida, Juan está pensando en irse de su pueblo.

Hoy el Tolima no solo vive variabilidad climática: hoy vive ciertamente el fenómeno de cambio climático, el cual repercute de forma directa en la calidad de vida de las familias, los equilibrios ecosistémicos en la naturaleza y en los ingresos de las familias. Es obvio que existe una bomba ambiental que amenaza con estallar en la sociedad.

Infortunadamente, nuestro departamento no está haciendo lo que debe hacer para evitar que este fenómeno se agrave. Un ejemplo, que además es un indicador, es el presentado la semana pasada sobre los planes locales de adaptación y mitigación del cambio climático. Muy pocos municipios en Colombia lo han elaborado y adoptado, como ya se imaginará el Tolima aparece como uno de los departamentos en donde las autoridades locales no han trabajado para elaborar los planes.

Así las cosas, el fenómeno del cambio climático nos tomará ventaja y como siempre la preocupación se convertirá en un problema cuando ya sea muy poco o muy costoso hacer algo.

Un comportamiento que preocupa es la pasividad del gobierno sobre este tema, pero además, mucho más las preocupaciones coyunturales de las personas. No es sino que llueva un par de días para que las personas se olviden fácilmente del fenómeno. Es hora de pensar en verde y asumir un cambio de comportamiento respecto al medio ambiente.

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