Según Transparencia Internacional (2013) Colombia, con un puntaje de 36 sobre 100, es uno de los países con mayor percepción de corrupción y ocupa el puesto 94 entre los 177 países en donde se elaboró el estudio que permitió dar a conocer el índice de percepción de la corrupción. Por otra parte, los resultados del comparativo de la Encuesta de Percepción Ciudadana de la Red de Ciudades Cómo Vamos (2013) aplicada en 11 ciudades de Colombia, reflejan la decreciente satisfacción con la forma como se invierten los recursos públicos, ya que para el año evaluado tan sólo el 29% de los encuestados manifestó estar satisfecho con la inversión ejecutada en sus ciudades y en Ibagué fue más crítica esta insatisfacción.

Lo anterior, no necesariamente habla de hechos concretos de corrupción, pero sí de la desconfianza por parte de la sociedad hacia las decisiones de los gobiernos que se toman de manera poco transparente; la ciudad necesita orientarse hacia mejores estilos de administración y planificación, para esto la transparencia a partir de información comprensible y confiable de los procesos, decisiones e inversiones es fundamental. Ésta es una de las consignas de los programas Cómo Vamos en Colombia, por lo cual es necesario insistir en esta reflexión teniendo en cuenta las dificultades por las que atraviesa nuestra ciudad, a propósito de decisiones tan importantes pero cuestionadas como el POT, la realización de los Juegos Nacionales, el proyecto de las fotomultas y el proyecto de vivienda gratis El Tejar, entre otros temas que han puesto a la ciudad en la mira del de los entes de control.

Sin el ánimo de establecer juicios que sólo corresponden a los organismos de control, compete a un programa como Ibagué Cómo Vamos recordar la importancia que tienen los procesos transparentes en la construcción de confianza, crecimiento y desarrollo de la ciudad. El Gobierno local no ha logrado superar la dificultad para establecer canales acertados que posibiliten hacer visible su gestión ante la ciudadanía; lo que se refleja por ejemplo en el Índice de Gobierno Abierto (IGA) elaborado por la Procuraduría General de la Nación, pues en el período 2012 - 2013 Ibagué ocupó el puesto 508 entre los mil 101 municipios evaluados, con un IGA de 70.3 sobre 100, lo que que significó un descenso de 302 posiciones respecto a la medición anterior y su ubicación entre las tres ciudades peor calificadas de la Red, antecedida únicamente por Bogotá y Cartagena.

Planeación y transparencia son las tareas pendientes para nuestra ciudad. Insistir en procesos transparentes significa garantizar las acciones que permitan a la sociedad conocer de manera oportuna, con calidad y sin manipulación alguna lo que hacen los gobiernos, para lo cual estos deben ofrecer información sobre su acción y someterla al escrutinio de la sociedad para su aprobación o sanción, “así, la transparencia en la gestión pública sería una de las condiciones favorables que sumadas a otras más, como el desarrollo institucional, la habilidad política para gestionar las demandas sociales, el alto nivel de confianza y la existencia de escenarios de diálogo social, político y económico que permitan la existencia de deliberaciones públicas, entre otros, constituyen escenarios de gobernabilidad” (Transparencia por Colombia).

De otro lado, Ibagué necesita empezar a caminar con metas claras y rumbos fijos. Al planificar lo que se quiere y cómo se va a lograr se podrá determinar de forma eficiente la asignación de los recursos existentes y se gestionará eficazmente los faltantes. Sin embargo, a esta ciudad aún hacen falta mecanismos de planeación, gestión y priorización efectivos y eficientes de políticas, proyectos y recursos, que le permitan superar la improvisación en decisiones que sí son determinantes para nuestro progreso.

Lo anterior sigue poniendo de manifiesto la necesidad de sistemas de información municipal que coordinen, articulen e integren la generación de información y que colaboren con la consolidación de una cultura de la transparencia, de la información, de la rendición de cuentas y de la planeación eficiente para un futuro menos incierto de la ciudad.

Coordinadora Ibagué Cómo Vamos