Abanderados

@lurueviv

El único momento en el que los colombianos nos arropamos con la misma bandera es cuando juega la selección de fútbol. Resulta grato ver como los estratos sociales desaparecen cuando la camiseta, que lleva los colores patrios, se vuelve uniforme, sin importar si se es alto, gordo, rubio, joven, ejecutivo, mensajero, rico, pobre, gay, petrista o uribista, así sea por cumplir un partido amistoso que la ‘tricolor’ vaya a enfrentar.

Opinión y competencias

Como hemos escrito en otras ocasiones, en el Estado de Derecho es imperativo que se respeten las competencias y los ámbitos de cada órgano. De lo contrario, el Estado de Derecho resulta teórico e inoficioso.