Formalización laboral: reto de la Ocde

Jaime Eduardo Reyes

El ingreso de Colombia a la Organización de cooperación para el desarrollo económico Ocde, le plantea al Gobierno nacional continuar con el proceso de formalización del empleo y de pequeños negocios.

Al ser parte del club de las buenas prácticas, Colombia está obligado a cumplir con ciertas tareas; algunas de estas se enfocan en el mercado laboral y las políticas sociales. El informe de 2016 plantea entre otros aspectos los siguientes:

Hoy día, el país cuenta con tasas de empleo y de participación de la fuerza laboral más elevadas que el promedio de los países de la Ocde, y el desempleo disminuye constantemente.

No obstante, a pesar de estas tendencias positivas, perduran profundos problemas estructurales. La informalidad laboral está generalizada, la tasa de autoempleo es elevada y muchos empleados tienen contratos irregulares. La desigualdad de ingresos es más elevada que en cualquier país de la Ocde, y la redistribución por medio de impuestos y prestaciones es insignificante.

En los últimos años el Gobierno colombiano ha implementado importantes reformas para abordar estos desafíos laborales y sociales, y los esfuerzos lentamente están dando resultados. Sin embargo, son necesarios mayores avances para mejorar la calidad de los empleos, la cobertura de la protección social, diálogo social y el bienestar general de todos. Se requieren reformas adicionales para sacar a los trabajadores de la informalidad y darles mejor protección, a ellos y a sus familias, contra la pobreza, las enfermedades y el desempleo.

Las recientes reformas para promover la formalización laboral están dando resultados, pero se deben eliminar las barreras que persisten, comenzando con el incremento de incentivos para que los trabajadores coticen a la seguridad social, y una mayor firmeza en la aplicación de legislación laboral para corregir la dualidad del mercado laboral. Las recomendaciones de política para Colombia planteadas por el comité de trabajo, empleo y asuntos sociales son entre otras; reducir las cargas fiscales en los salarios y simplificar los procesos de afiliación a la seguridad social por parte de las compañías.

De manera más detallada se recomienda:

Avanzar aún más para proporcionar ayuda económica a las personas desempleadas.

Afrontar la informalidad laboral. 1) mejorando el vínculo entre lo que se les exige a los trabajadores y patronos que aporten al seguro social y las prestaciones y servicios que reciben a cambio; 2) informando mejor a los trabajadores acerca de las prestaciones del seguro social; 3) fortaleciendo la aplicación de la legislación laboral, y 4) corrigiendo los complejos procedimientos para la inscripción de empresas y la afiliación de trabajadores a la seguridad social.

Además se deben revisar diferentes contratos atípicos del mercado laboral para evitar abusos y promover la formalización.

Así las cosas, no es sólo haber ingresado a la Ocde, sino mantenerse y cumplir con lo pactado. A partir de ahora el debate girará en torno a estas nuevas condiciones y cómo lograrlas.

Comentarios