Destacar aspectos diferenciadores y simplificar su Hoja de Vida con lo más relevante de su perfil son algunos de los elementos a tomar en cuenta para competir en el mercado laboral con las nuevas generaciones.

Llega el 2018 y con él una ola de ajustes en los precios y costos de algunos bienes, productos y servicios, que es preciso estimar en el presupuesto personal y del hogar al comenzar el año.

Iniciar un emprendimiento es uno de los ejercicios más fáciles de realizar; sin embargo, como explica Boston Consulting Group es importante que tenga en cuenta ciertos parámetros que definirán el futuro y la sostenibilidad del emprendimiento.

Se acerca diciembre, que, como sabemos, es un mes de mucho gasto. Pero esto no implica derrochar el dinero, pues hay que prepararse para las compras navideñas. Por eso, es bueno tener recomendaciones para hacer rendir el sueldo de ese mes y aprovechar las innumerables ofertas que se presentan.

Con las medidas adecuadas para proyectar sus gastos en esta temporada, podrá disfrutar de la Navidad con sus regalos, vacaciones y salidas protegiendo sus finanzas personales.

Un ciclo económico se define como los aumentos y descensos (fluctuaciones) recurrentes de la actividad económica global, es decir, en los sectores económicos más importantes durante un periodo determinado.

La premisa es desconfiar y abstenerse de invertir dinero en sitios donde les prometan altos rendimientos de ganancia sin una justificación tangible y exigiendo la vinculación de otras personas.

El ahorro debe ser un hábito personal fundamental y una característica de la economía familiar. Sin embargo, no basta con apartar y guardar un monto de dinero en un periodo determinado, sino prever con antelación a qué se va a destinar.

Pocas son las personas que acuden a la ley de insolvencia para realizar una conciliación en el pago sus obligaciones financieras.

Comparar con calma los proyectos, las entidades financieras y las condiciones de la oferta inmobiliaria, entre otras variables, son algunos consejos prácticos para no salir con las tablas en la cabeza al final del negocio.