En plata blanca
Hay cosas que debemos decir en plata blanca así incomoden a tirios y troyanos. Tal es caso del rol que históricamente han desempeñado los partidos políticos en el devenir del Tolima, rol fácil de calificar porque basta con mirar cómo la realidad y las evidencias de la dinámica cotidiana revelan más decadencia que progresismo, mirada que permite concluir en que tal rol ha sido más lesivo que provechoso y que un juicio sobre el partidismo en el Tolima nunca se hizo, pues, así parece, ideólogos, intelectuales, investigadores y críticos no quieren coger “el toro por los cuernos” o califican de normal esa aberración política y por ello se entronizó el personalismo como única, desastrosa y falsa verdad político-electoral en el Tolima.