Lo mató con una piedra en un hostal de Coyaima

SUMINISTRADA - EL NUEVO DÍA
Lianer Antonio Ramos Aguirre, fue presentado a estrados judiciales por el delito de homicidio agravado y hurto calificado y agravado. En su contra había una orden de captura expedida por el Juzgado Segundo Municipal de Control de Garantías, por hechos en los que resultó muerto un hombre en Coyaima.

Audiencia

Según la Fiscal 11 Seccional de la Unidad de Vida, Ramos Aguirre fue capturado en Chinchiná, Caldas, gracias a una fuente que entregó información sobre su paradero. El hombre sería el presunto responsable de la muerte de Carlos Román Melengue Quilingo, asesinado el 4 de agosto en La Vega, Coyaima en 2018.

En la diligencia judicial, el ente acusador señaló que ambos hombres llegaron esa madrugada de agosto hasta el Hostal Duván, luego de un viaje que emprendieron en moto desde Pitalito, Huila.

“La víctima manejaba la moto de placa YGM 97, marca Honda. Cuando llegaron allá solicitaron una habitación porque su viaje continuaba. Se ubican en el hostal, les asignaron la habitación tres y utilizando una piedra, Ramos Aguirre le propina un golpe fatal en el cráneo a Melengue Quilingo mientras él dormía, que lo ultima de manera inmediata”, relató la Fiscal.

Y agregó que sobre las 9:30 a.m., Ramos Aguirre salió de la habitación cambiado de ropa y le indicó a las personas del Hostal que no podía dormir y que ya volvía. Según la Fiscalía: “Sale en la moto de la víctima y no se vuelve a conocer de su paradero hasta ayer (viernes), hurtando la moto y celular del hoy occiso”.

El hallazgo del cuerpo sin vida se produjo hacia las 2:00 p.m., cuando trabajadores del hostal ingresaron al cuarto, al ver que nadie salía.

Según el ente acusador, Ramos lo habría asesinado para hurtarle sus pertenencias, luego de hacerse amigo de la víctima cuando recogían café en Pitalito y convencerlo de hacer un viaje en moto hasta Chinchiná.

Necropsia

El cuerpo de la víctima ingresó a Medicina Legal como no identificado y con múltiples heridas en el rostro y región parietal que hundieron la cavidad ósea del cráneo.

Credito
EL NUEVO DÍA

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