Preconstituyente, bandera de la Marcha Patriótica

La marcha campesina del pasado viernes fue una muestra del inconformismo de las regiones con la política agraria del Gobierno y las acciones efectuadas para ayuda del sector rural.

Los campesinos de los sectores Sur y Centro del Tolima, especialmente, se reunieron durante dos días en la capital con el ánimo de debatir lo que serían las propuestas para efectuar una Constituyente nacional bajo el liderazgo del movimiento de la Marcha Patriótica.  

La gran conclusión fueron las cuatro mesas: autonomía en las regiones, mayor inversión en salud y educación, no a los proyectos mineroenergéticos y paz con justicia social. 

Jailer González, presidente de la Asociación de Trabajadores Campesinos del Tolima, Astrocatol, afirmó que todos los sectores políticos y económicos están invitados a participar de la Constituyente en la que estén reflejadas las demandas de los campesinos.

Según González, es “lamentable que en el país se tilde de infiltrado o que es financiado por grupos armados ilegales” a quienes exigen respuestas por parte del Gobierno en cuanto a inversión social. 

El vocero afirma que es necesario eliminar ese estigma de que los sectores de izquierda están infiltrados por actores armados ilegales para poder entablar un diálogo con compromisos reales para las regiones. 

Por otro lado, González resaltó que ya se han efectuado cerca de 38 reformas a la Constitución Política, en las que no se ha tenido en cuenta al campesinado.

Diálogos de paz no son la única solución 

La declaración política de la mesa por el Tolima refiere que los diálogos que se llevan a cabo en La Habana, Cuba, entre las FARC y el Gobierno, no son suficientes para alcanzar la paz.

“El campo no es rentable, no porque no produzca, sino porque no ha habido un apoyo y una política real que solucione los problemas de raíz en el sector”. 

De acuerdo con González, la solución al conflicto armado implica “el buen vivir de todos y todas, es decir un conjunto de condiciones que garanticen la vida digna”.

Los campesinos del Tolima señalaron que “necesitan mayores oportunidades para acceder a la tierra y resolver los problemas productivos en cuanto a la adquisición de los insumos y los medios necesarios para su comercialización”. 

En cuanto a la política laboral de los jornaleros, se señaló la necesidad de que pudieran acceder a prestaciones sociales y el derecho a obtener una pensión.

“Los cafeteros partícipes en la preconstituyente demandamos una nueva política para el sector que garantice un precio estable y subsidiado para los insumos del cultivo, unos precios justos para nuestro café y la apertura de nuevos espacios comerciales; así como vías apropiadas para sacar nuestros productos, asistencia técnica y condiciones de trabajo dignas para nuestros jornaleros”, señala la misiva.

Reservas campesinas 

De acuerdo con el Presidente de Astrocatol, se necesita declarar reservas campesinas en las zonas rurales del país para que sean los propios campesinos quienes decidan qué cultivar y qué proyectos de desarrollo que sean de explotación mineroenergética se ajustan a las necesidades de la región, pues son las multinacionales las que están decidiendo el futuro de la comunidad. 

“Ni siquiera las alcaldías tienen autonomía, porque la que viene a solucionar los problemas es la multinacional, entonces es uno de los problemas en donde se ha perdido autonomía. No compartimos esa idea de que se nos lleven los recursos naturales para beneficio de unos pocos, porque eso es lo que ha venido sucediendo”, señaló González. 

Credito
REDACCIÓN EL NUEVO DÍA

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