Las universidades en estos momentos de cuarentena enfrentan un problema de adaptación sin precedentes.

Ante la imposibilidad de ofrecer clases presenciales la opción de la educación a distancia se ha convertido en un tema de debate entre estudiantes, profesores y administrativos.

Un número muy grande de estudiantes se oponen a las clases virtuales, principalmente por dos razones. Una, consideran que la calidad en la educación baja al suprimir el componente presencial.

El otro argumento es que muchos de ellos no tienen acceso a un computador o a internet de calidad para poder recibir las clases desde los lugares en que están confinados.

El Ministerio de Educación, mediante un decreto, le pidió a las universidades del país que se prepararan para dar sus clases de manera virtual, por lo menos hasta el próximo 30 de mayo. Una vez finalizado este periodo, las universidades pueden volver a la presencialidad.

Sin embargo, dada la alta posibilidad de que el periodo de cuarentena se extienda, o que otro tipo de restricción similar se implemente en el país, ya las universidades de la región han comenzado a elaborar planes de contingencia para continuar funcionando.

Universidad del Tolima

La Universidad del Tolima, única pública del departamento, garantizaba la continuidad del semestre académico. En ese sentido, están adelantando un censo (virtual) para intentar determinar cuánta de su población estudiantil tiene posibilidades de acceder a un computador e internet.

La Vicerrectoría Académica diseñó una estrategia en cuatro fases: la primera de ellas es un censo virtual, con el cual busca determinar qué porcentaje de su población estudiantil tiene acceso a los medios necesarios para recibir las clases virtuales.

La segunda fase es una revisión de los planes de estudio y microcurrículos para mirar en qué medida se puede reorientar de acuerdo al nuevo contexto, haciendo uso principalmente de las TIC.

La fase tres es la implementación de estas reorientaciones y variaciones en las metodologías. Finalmente, la cuarta fase es la de seguimiento, monitoreo, acompañamiento y ajuste de las estrategias.

“Por ahora decirles que estamos trabajando en un paquete de medidas para beneficio de la población estudiantil más vulnerable”, aseguraron desde la oficina de prensa de la UT.

Universidad de Ibagué

La Universidad de Ibagué informó que el martes 24 de marzo se reanudaron las actividades académicas de manera remota, las cuales irán hasta la terminación de los Planes de Desarrollo de Asignatura, con un breve periodo de descanso en Semana Santa.

Dentro de las modificaciones metodológicas la institución anunció clases sincrónicas, en las cuales docentes y estudiantes participan en tiempo real, clases grabadas, en las cuales el docente prepara la clase y se la envía a los estudiantes, los cuales pueden recibirlas en diferido, clases por correo electrónico en los casos en que las condiciones geográficas dificulten el acceso a la conectividad permanente.

En días pasados la institución le entregó a ochenta y cuatro de sus estudiantes, en calidad de préstamo, equipos de cómputo portátiles con los cuales puedan acceder a las clases virtuales.

CUN Regional Tolima

La Corporación Unificada Nacional de Educación Superior (CUN) informó que desde hace tres semanas migraron a la modalidad virtual. Para ello están usando la plataforma que Google les provee a nivel institucional.

“Fuimos la primera universidad de Ibagué en migrar completamente a lo virtual. Tuvimos una muy buena acogida por parte de los chicos. Hay algunos estudiantes con problemas y por eso hemos establecido una mesa de optimización académica, en donde participan representantes estudiantiles espontáneos para mirar casos especiales y cómo van a desarrollarse las clases”, dijo Javier Vivas, director regional de la institución.

La institución también implementó una encuesta para definir aspectos a mejorar de los cambios que se han implementado.

“Ese canal de comunicación también nos sirve para preguntarles si se sienten solos y quieren hablar con alguien, con lo cual nuestro equipo de bienestar comience a hacer esas llamadas de acompañamiento emocional”, dijo.

“La virtualidad y la presencialidad no rivalizan, sino que son un complemento. En la medida en que vamos avanzando estamos realizando una capacitación muy fuerte con los profesores para que aprovechen las herramientas”, agregó.

Una propuesta que la CUN ha realizado es que una vez se supere la crisis provocada por el Covid-19 los estudiantes que consideren necesario un refuerzo académico podrán acceder a él sin ningún costo.

Universidad Cooperativa de Colombia

La Universidad Cooperativa de Colombia (UCC) afirmó que ha asumido el reto de dar continuidad a la planeación académica a través de la estrategia de educación remota, fortalecida desde la capacidad institucional que se ha gestado en los últimos años con desarrollos tecnológicos.

“La universidad cuenta con TIC robustas, confiables y con respaldados internacionales como Brightspace, la cual integra en el campus virtual herramientas de aprendizaje en línea. Dexway para aprendizaje en el idioma inglés, la cual posibilita más interacción y mejor navegabilidad”, dijo la institución.

Las clases remotas se realizarán por medio de Microsoft Teams.

Por otro lado, la UCC afirma que el plan en estos momentos de crisis es estudiar con educación remota y flexibilidad curricular.

La ICC diseñó un instructivo para acompañar a los estudiantes en la nueva metodología a distancia y una guía para el trabajo independiente de estudiantes en la contingencia del Covid-19.

La opinión de los estudiantes

Según varios voceros estudiantiles del país, la dificultad para realizar un semestre virtual tiene que ver con que muchos estudiantes no tienen acceso a un computador o a internet. La situación en la región es similar.

“Es triste que la universidad no tenga garantías para las personas que no poseen internet, muchos tienen paquetes de datos solo para whatsapp y otros no tienen, a muchos no nos alcanza el dinero”, afirmó Mia Morales, estudiante de la Universidad del Tolima.

También dijo que hay que pensar en las personas de escasos recursos o que viven en zonas remotas: “Hay estudiantes que viven en veredas donde la señal no llega y les toca estar allá con sus familias en medio de la crisis. No me parece viable las clases virtuales”, agregó.

Una estudiante de la Universidad de Ibagué opina que no todas las clases se pueden ver de manera virtual. Por eso propone que una opción es que se vean solo unas materias, mientras que otras habría que aplazarlas hasta cuando haya presencialidad.

“Yo creo que la calidad de la educación virtual no es la más adecuada. Las prácticas son un componente importante para los estudiantes y, con esta situación, no las vamos a tener”, afirma Karol Serrano, estudiante de la Universidad de Ibagué, oriunda de Rioblanco.

“Acá en Rioblanco no es que sea muy buena la señal del internet. Yo puedo estar en una clase virtual y escucho entrecortado y me pierdo del hilo de la clase. El fin de semana pasado el internet molestó todo el tiempo. Me tocó hacer los trabajos cuando volvió el lunes”, dijo Karol Serrano.

Natalia Monroy, estudiante de noveno semestre de Diseño de Modas CUN, dice que por las características de su carrera sería difícil que ella o sus compañeros de clase reciban un semestre virtual.

“Al ser una carrera práctica, en donde los estudiantes requieren de unos elementos de aprendizaje como máquinas de coser y el docente para guiar y corregir, las estudiantes de menores semestres se verán afectadas al ver que pagaron por un semestre en donde aprenderán de esta práctica”, dice Natalia Monroy.

“En mi caso no quisiera que se aplazara el semestre, porque este semestre termino materias y deseo graduarme en septiembre, pero sé que muchas chicas de otros semestres como mencioné sí lo preferirían”.

Dato

Las universidades, al no tener seguridad sobre la ampliación o no de la cuarentena, aún no definen si el próximo semestre se realizará de manera virtual.