Se salvó la vida pero quedó sin un techo: el invierno dejó a Jesús García a la deriva

Jorge Cuéllar / EL NUEVO DÍA
Crédito: Jorge Cuéllar / EL NUEVO DÍALaguer de Jesús García Hoyos habitante del barrio San José que lo perdió todo durante la madrugada del lunes.
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Aumenta el número de damnificados por las lluvias, en esta ocasión, un adulto de 64 años que logró escapar de la muerte es el afectado y busca la solidaridad de los pobladores.
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Con ocasión de las fuertes lluvias, Laguer de Jesús García Hoyos, quien reside en el barrio San José, por la denominada vuelta al chivo, se quedó sin vivienda. 

En la madrugada del lunes, mientras dormía, los palos de guadua que sostenían su ‘rancho’ perdieron estabilidad debido a la remoción de tierra, por lo que tejas, elementos de madera, plástico y polisombra se desplomaron.

En medio de lágrimas, el afectado comentó que estaba vivo de milagro, porque en el momento de los hechos dormía, y a pesar de que varios objetos le cayeron encima, al punto de dificultar su salida de los escombros, el árbol de aguacate que está al lado de la casa evitó que ocurriera una tragedia, puesto que sobre la planta quedó gran parte del material que comprendía el techo.

Mientras García vivía momentos angustiantes, uno de sus vecinos se levantó porque escuchó un estruendo y en medio de la oscuridad con la linterna del celular logró ver lo que había sucedido, por lo que empezó a llamar en busca de ayuda.

“Yo gritaba su nombre porque no lo veía por ningún lado, y llamé a los bomberos, llamé a Gestión del Riesgo y nadie vino a auxiliarlo, de bomberos lo que contestaron era que estaban ocupados y pues yo sé que él vive solo por lo que bajé a buscarlo”, indicó el joven que se dedica a limpiar vidrios y está indignado porque los hicieron sentir como si sus vidas no importaran.

A pesar de la falta de apoyo por las autoridades, el adulto de 64 años consiguió salir y al reaccionar ante la situación supo que lo había perdido todo, solo le quedó la pantaloneta que llevaba puesta y la gratitud con Dios por seguir con vida.

A modo de solidaridad, uno de sus vecinos le regaló un par de zapatos, un pantalón y una camiseta, sin embargo, se quedó sin techo y sin rumbo. 

García, quien indicó vivir solo, no sabe leer ni escribir y sobrevive diariamente de la venta de cuchillas de afeitar o de la caridad de las personas y que en ocasiones pasa el día con una comida en su barriga, está aferrado a lo que era su casa desde hace 20 años, pues era su lugar seguro.

Suministrada / El Nuevo Día
Jorge Cuéllar / El Nuevo Día. La vivienda improvisada en la que reside un adulto mayor quedó en el piso. 

Quedarse sin ella lo embarga de nostalgia, por lo que iba a buscar la forma de pasar la noche en el sitio, el cual, para acceder, se debe subir por entre la montaña, y de esta manera proteger sus enseres (tejas, cama, la estufa, entre otros) del vandalismo, mientras consigue la forma y la fuerza para levantar el rancho.

Frente a la falta de intervención de la Administración municipal y demás organismos de socorro,  Laguer de Jesús García solicita el apoyo de los ibaguereños, por ello quien desee respaldar de alguna forma se puede comunicar al número de su hermana Franci, 311 482 6547, quien no vive con él, y tampoco tiene la forma de auxiliarlo, ya que también es de la tercera edad.

 

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Credito
REDACCIÓN IBAGUÉ

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