Un colombiano en Miami

Hermógenes Nagles

Jaime Bayle, el entrevistador de televisión más visto en Miami dijo hace dos días que el gobierno de Iván Duque Escobar, mejor dicho, de Colombia, fue el que puso en alerta al dictador Maduro de que un puñado de mercenarios venezolanos y americanos intentaba matarle o entregarlo vivo a los Estados Unidos.
PUBLICIDAD

Por ironías de la vida Duque, sin quererlo, terminó de soplón del dictador. Basta con repasar las noticias de los periódicos de hace dos meses para comprobar que el 26 de marzo de 2020, la prensa nacional dio cuenta del decomiso por parte de la policía de un gran arsenal compuesto por fusiles de asalto, AR-15, miras láser, visores nocturnos, silenciadores, chalecos antibalas y cascos, transportados en una camioneta por la carretera Barranquilla - Santa Marta. Su conductor delató que iba rumbo a la Guajira, departamento adyacente a Venezuela, el otro hueco fronterizo por donde todo pasa diariamente, leche, gasolina, huevos, marihuana, coca y armas.

Desde entonces Maduro reforzó los controles fronterizos y sus puestos de guardia y estuvo listo el 5 de mayo para abatir a 23 despistados navegantes que acamparon de madrugada en Macuto. Allí mueren 8 intrépidos y desquiciados golpistas, 15 más son detenidos, entre ellos, dos americanos. “Si con ese ejército de descamisados el presidente Trump pretendió tumbar a Maduro, está loco de remate, yo personalmente no creo que los Estados Unidos tengan algo que ver con semejante bestialidad”, aseguro Bayle.

Esta semana hablaron aquí en Miami los autores intelectuales del frustrado asalto, denominado Operación Gedeón. Confesaron que el libreto lo escribió el exasesor del presidente Juan Manuel Santos, el famoso publicista y asesor político JJ Rendón, quien contrata para llevar a cabo su genial película a un mercenario gigantón, de nombre Jordan Goudour y a dos exsoldados excombatientes de las guerras de Irak e Irán, quienes deben viajar a la Guajira colombiana y desde allí navegar hasta Macuto para asestar el golpe final al dictador. Valor del contrato de servicios: 50 mil dólares.

JJ Rendón, fue famoso en las últimas campañas presidenciales de Colombia por poner de moda la propaganda negra en la política doméstica. Denigró hasta donde más pudo de los contendores de Juan Manuel Santos en su primera y segunda vuelta presidencial. Santos ganó y JJ Rendón gozó de contratos millonarios que le permiten hoy llevar vida de jeque árabe petrolero en la Capital del Sol. Parece que ahora en Miami, Rendón se inventó esa fuerza de asalto jugando a la ruleta rusa, tratando con ingenuidad macondiana de derrocar a Maduro. Apostaba, de paso, a ganarse otras dos nuevas fortunas, tanto en Estados Unidos como en Venezuela.

HERMÓGENES NAGLES

Comentarios