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Hacer crecer su número de seguidores es enviar el mensaje adecuado a las personas adecuadas en el momento adecuado.
En 2020, más de 3800 millones de personas en todo el mundo usaban las redes sociales y se prevé que ese número aumente a casi 4410 millones para 2025, según datos del informe Digital 2020, elaborado por Hootsuite y We Are Social.
Nadie dice que tiene que ser un influencer o tener un emprendimiento para preocuparse por su número de seguidores: incluso si es una persona “común y corriente”, aumentar el número de personas que reciben su mensaje es de gran utilidad. Y, además, es divertido.
A continuación, expertos le cuentan cómo hacerlo.
A. Publique con frecuencia. Publicar una vez por semana o más, además de comentar las publicaciones de otros cuando tenga oportunidad le ayudarán a ganar más seguidores.
B. Sea audaz. Atrévase a grabar videos en los lugares que visita con un pequeño comentario sobre cómo se va sintiendo. Use los reels, que son muy populares en redes como Facebook, Instagram y TikTok, atrévase a cantar “sin voz”, los tonos de moda... En fin, diviértase.
C. Sea creativo. De acuerdo con sus intereses y lo que más le guste, publique post relacionados, fotos, noticias... Todo esto le ayudará a crear una comunidad que aumentará su número de seguidores.
Cómo manejar a los “trolls”
La agencia another y el experto en Community Manager Ángel Berrio, consultado por esta redacción, le ofrecen sus claves para que maneje sus redes sociales como todo un profesional:
1 Pensar antes de reaccionar. Ante una crítica o un ataque, no es recomendable escribir respuesta llevada por la emoción. Levantarse de la silla y tomar un poco de aire, puede ayudarle a sentirse relajado y concentrado en lo que quiere decir.
2 Estando frente a un ataque, se debe evitar bloquear la cuenta y borrar los mensajes. Borrar y bloquear es el equivalente a darle la razón al atacante. Ocultar el comentario puede ser una opción más acertada.
3 Tomar acciones alineadas con sus valores. Se puede contestar directamente con la mayor educación sin llegar al nivel del atacante. Lo mismo pasa con comentarios positivos.
4 No perder el tiempo ni la cabeza con los trolls. Las redes sociales están plagadas de estas personas que se alimentan de la rabia de los otros usuarios insultando y criticando opiniones sin argumentos. Si se encuentra con estos personajes, y si el problema no es con uno, simplemente no se le debe seguir el juego.
5 Contestar calmada y amablemente. En el otro lado de la moneda, existen personas que hacen comentarios constructivos, corrigen errores que cometen otros usuarios o expresan puntos de vista contrarios a lo expresado. Nadie es infalible en la gran plaza pública que es una red social. Cuando se encuentran este tipo de comentarios, sólo hay que agradecer y aclarar los puntos que podrían crear controversia.
6 Las críticas no son insultos. Los mensajes escritos suelen llevar la intención que le quiere poner quien los lee: un chiste inocente puede transformarse en un ataque o en una burla, según las circunstancias en que sea visto. Es válido, para evitar estas ambigüedades, neutralizar esos textos con algo similar a: “No entiendo lo que me quieres decir. ¿Por favor, me explicas?”.
7 Aprovechar el recurso del inbox. En caso de una discusión acalorada y que tenga posibilidad de salirse de control, si es posible y las prácticas de la marca lo permiten, se puede invitar al atacante a tener una conversación privada, donde se pueda debatir sin necesidad de insultos públicos que animen a otras personas a tomar partido.
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