El servicio de transporte urbano en la ciudad no convence a los ibaguereños. El tiempo de espera de ciertas  rutas, la mala atención de algunos conductores, la velocidad con la que manejan (muy rápido o muy despacio), el mal estado en la que se encuentran los automotores, los ciudadanos imprudentes que esperan las rutas en sitios prohibidos y los que se vuelven cómplices de saturar un bus de pasajeros, son algunas de las problemáticas que requieren de mayor solución en la ciudad.

Lo cierto es que el desorden vehicular es evidente. El secretario de Transporte y Movilidad, Pedro Julián Gómez, manifiesta que “en Ibagué circulan alrededor de mil 250 busetas de las empresas Expreso Ibagué, Logalarza, Cotrautol, Traslain, Tures Tolima, La Ibaguereña y Flota Cámbulos, afirmando que “evidentemente hay una sobreoferta en este servicio”.

El problema además no sólo es por la cantidad de buses que hay y que se encuentran en mal estado, sino por el servicio que están prestando a la ciudadanía y la forma en la que se asume el papel de pasajero responsable.

La discordia
El gerente de la empresa La Ibaguereña, Fabio Alberto Camacho, señala que los conductores son capacitados en atención al cliente y en cómo deben manejar la movilidad en la ciudad. Resalta que el problema en la zona urbana surge de la falta de Cultura Ciudadana. “Las personas abordan y timbran en sitios no permitidos y se enojan si el conductor no atiende al llamado”, explica el Gerente.

Por su parte, Lina Enciso, habitante del barrio Jordán, cuenta que en varias ocasiones ha sido espectadora de situaciones lamentables de algunos conductores. “Una niña que yo cuido se iba a bajar de una buseta por la carrera Quinta y el señor no esperó a que ella lo hiciera y arrancó, causando que se cayera y por eso le tuvieron que coger cinco puntos en la cabeza”, cuenta Enciso.

Otros habitantes, que se ubicaron en la calle 15, manifestaron que hay rutas que se demoran mucho en pasar como la 19 y la 28, y cuando lo hacen, no alcanzan a abordarlas por la velocidad que llevan.

Jhoany Osorio, ciudadano,  reconoce que lo que le falta a  Ibagué es cultura del peatón, “no estamos acostumbrados a abordar los buses en los paraderos existentes y las empresas de transporte no dan ejemplo porque paran en todo lado”.

También se hace mención de otras problemáticas, como la competencia de algunas rutas por nivelar el tiempo que se registra en los diferentes ‘controles’ de la ciudad.

El mal estado de los automotores, las registradoras son duras para pasar, las sillas no tienen espacio una de otra y para las personas altas es incómodo el servicio, son otras de las tantas quejas.

También el olor a combustibles que producen algunos vehículos terminan por producir mareos y náuseas en los pasajeros.  
Ante estas quejas, el Gerente de la Ibaguereña dice que en varias administraciones se ha intentado hacer una reposición de automotores, porque reconocen que muchos buses no deberían estar circulando en la ciudad por el mal estado en el que se encuentran. No obstante, aún lo hacen y el caos tiende a crecer.
    
Buses especiales
En la ciudad no hay un sistema de buses que permita el traslado de las personas discapacitadas, de los adultos mayores, de los niños o las mujeres gestantes.

Estas personas se convierten en la población más afectada con la ausencia de este servicio. “Los jóvenes no se preocupan por ceder el puesto; no hay buses con sillas destinadas para dicha población”, dice Laura Londoño turista de la ciudad.

¿ Será que ahora sí?
En enero de 2011 se anunció que arrancaría el nuevo Sistema Estratégico de Transporte. Un año después el sistema no ha iniciado.

En su momento, el entonces alcalde de Ibagué, Jesús María Botero, dijo que el proyecto consistía en la reorganización de rutas y el nuevo sistema de recaudo que sustituirá de manera progresiva los tradicionales pagos a través de una tarjeta inteligente. Ahora se empieza hablar de retomar el proyecto para después de la Semana Mayor.

Pedro Julián Gómez explicó que dentro de la implementación del programa Ciudades Amables, se espera que con un plan conjunto con las demás secretarias de la ciudad se continúe con el proceso que inició la administración pasada.

En el plan se contemplarán la oferta vial, los paraderos de la ciudad, las rutas de transporte, la Unidad Transportadora y el sistema de recaudo centralizado.

También se trabaja en la implementación del ente gestor que va a gerenciar los recursos que entregue el Gobierno central. Todo esto se espera que arranque después de la Semana Santa y se tenga el proyecto para mediados de este año.

Lista
Cambios que propone el Sistema Integrado de Transporte
1. Se reducirán las rutas actuales, mejorando la unidad transportadora, con buses más grandes.

2.Se socializará con la comunidad, el nuevo sistema de recaudo de transporte a través de las tarjetas.

3.La reposición de vehículos, según el Secretario, será una realidad progresiva después de abril.

4.Cultura ciudadana a través del uso de las señales de tránsito y los parqueaderos.

5.A los conductores se les garantizará un seguro y una jornada laboral de ocho horas.


El decreto 3422 es el sistema por el cual se reglamentan los Sistemas Estratégicos de Transporte Públicos (Setp) de conformidad con la Ley 1151 de 2007.

Se definen como aquellos servicios de transporte colectivo integrados y accesibles para la población en radio de acción, que deberán ser prestados por empresas administradoras integrales de los equipos, con sistemas de recaudo centralizado y equipos apropiados, cuya operación será planeada, gestionada y controlada mediante el Sistema de Gestión y Control de Flota, Sgcf, por la autoridad de transporte o por quien esta delegue y se estructurarán con base en los resultados de los estudios técnicos desarrollados por cada ente territorial y validados por la Nación a través del DNP.