El ambiente campestre representa un orgullo para los habitantes de Calambeo, al igual que la cantidad de aves y plantas que se aprecia en la zona, pero el afán de urbanizar les genera preocupación por las posibles afectaciones ambientales tras las obras de infraestructura que se proyectan.
Calambeo es la zona natural más cercana al centro de Ibagué, donde se ubican sitios eco-turísticos de gran importancia para la ciudad como el Jardín Botánico San Jorge, que cuenta con 60 hectáreas de reserva.
Pero no solamente esto hace importante este pulmón de la ciudad, sino también que en el sector se ubiquen colegios de renombre, como las instituciones educativas técnica musical Amina Melendro de Pulecio e Inem Manuel Murillo Toro, al igual que lugares destacados como la Clínica Instituto del Corazón, el Departamento de Policía Tolima (Detol), restaurantes, discotecas y zonas deportivas.
Proyectos inmobiliarios
Por todas estas ventajas naturales, las constructoras han puesto sus ojos en el lugar, pero los residentes ven con preocupación que se lleven a cabo proyectos de gran envergadura, asegurando no contar con la infraestructura adecuada, ya que no hay alcantarillado, no se cuenta con andenes, la calle es muy angosta y su acueducto es de tipo veredal.
Gran parte de las viviendas cuenta con un pozo séptico, porque el colector de aguas lluvias que hay desemboca en la quebrada Chipalo, y temen que el afluente se siga contaminando al ser utilizado como conductor de aguas negras.
En los últimos meses algunos terrenos han sido comprados por constructoras que pretenden realizar grandes proyectos inmobiliarios, como sucede con la empresa Cimcol S.A., que aunque asegura estar estudiando los diseños y no tener un plan concreto, entre los habitantes de Calambeo hay rumores de que la construcción contará con hasta 300 apartamentos.
Según Juan Guillermo Franco, gerente de Proyectos de Cimcol S.A., “estamos apenas en el diseño, ya que tenemos que hacer un plan de urbanismo al interior, y al tener definida la capacidad del número de viviendas que se va a tener, nos dirigimos a las empresas de servicios públicos para solicitar las disponibilidades, pero hasta el momento no lo hemos hecho, porque apenas estamos en la etapa inicial de diseño”
La comunidad ha enviado cartas a los organismos de control, que autorizan las obras urbanísticas para que les resuelvan diferentes inquietudes, pero no han tenido la respuesta que esperan; y según Franco, se debe a que ellos no ha tramitado ningún permiso porque aún no tienen definido, aunque ya cuentan con el cerramiento del terreno.
Además están dos posibles proyectos más, uno conocido como ‘Verde Menta’ y otro que está en proceso de diseños en el mismo sector, para los que se especulan 40 y 90 viviendas respectivamente, razones que llevan a los residentes de Calambeo a asegurar que ‘no hay cama pa tanta gente’.
Molestias
La comunidad teme que el sector continúe perdiendo la calma, ya que actualmente se produce el taponamiento de las vías, y a las horas pico, formándose trancones a raíz de la cantidad de vehículos que ingresan a trasladar a los estudiantes de los colegios, y esto también impide el paso de las ambulancias a la Clínica.
Pero como si fuera poco, los lugares nocturnos corresponden a otra problemática de tranquilidad, no solo para los habitantes del sector, sino también para los pacientes del Instituto del Corazón.
Estas situaciones los hacen estar inconformes con la estratificación que llega a nivel cinco, porque aseguran que en la realidad los servicios públicos no son acordes al cobro del impuesto pre dial.
Pero, aún así, durante años los residentes han tratado de preserva r el lugar campestre que hoy los enorgullece, y con ese mismo espíritu hacen el llamado para que los organismos de control atiendan a su preocupación y brinden las garantías para que Calambeo siga siendo un territorio de armonía.
Comentarios