Más de 100 familias en el Sur del Tolima son titulares de predios formalmente

JORGE CUÉLLAR – EL NUEVO DÍA
Ante el alto número de predios que hay en el región sin titulares, el ministro de Agricultura, Juan Guillermo Zuluaga, indicó que se debe poner el “acelerador” al proceso de formalización.

Más de 150 familias de Chaparral y Ataco recibieron la legalización de los títulos de propiedad por parte de la Unidad de Restitución de Tierras y la Agencia Nacional de Tierras.

Ahora, los beneficiarios esperan que el Estado empiece a ejecutar proyectos de inversión que lleven a las zonas más apartadas verdaderas oportunidades de progreso.

En la jornada que se adelantó en Chaparral, participó el ministro de Agricultura, Juan Guillermo Zuluaga, quien indicó que este tipo de acciones permiten materializar la paz en la zona rural.

“Hay algunos que les parece que el tema de la paz no es importante, seguramente no lo han sufrido, no han visto las estadísticas de un país de 53 años en guerra con 280 mil muertos y más de ocho millones de víctimas”, comentó el funcionario.

A través de un conversatorio, Zuluaga hizo que los directores de la Agencia Nacional de Tierras, ANT, la Unidad de Restitución de Tierras, URT, y la Agencia de Desarrollo Rural, ADR, le contaran a los habitantes del Sur los resultados del trabajo adelantado hasta la fecha y lo que se espera lograr en el último año del gobierno Santos.

 

Legalización: un arduo trabajo

El director de la ANT, Miguel Samper Strouss, dijo que en el Tolima hay un 56 por ciento de informalidad en tierras, esto significa que de 181 mil 934 predios rurales, 102 mil 581 no tienen escritura, a pesar que hay decenas de casos en los que los poseedores llevan más de una década habitándolos.

También, la falta de una escritura se debe al desplazamiento forzado y a los hostigamientos de grupos al margen de la ley.

Ante esta cifra, el Ministerio de Agricultura le solicitó a la ANT poner el “acelerador” a la formalización de tierras teniendo en cuenta que este gobierno está por finalizar.

Por lo que Samper Strouss dijo que el Sur, por ser azotado fuertemente por el conflicto armado, “fueron seleccionados Ataco, Planadas, Rioblanco y Chaparral para hacer una operación masiva de formalización de la propiedad rural. En un mes iniciaremos esta estrategia”.

Esta labor consistirá en visitar cada finca y buscar en el territorio soluciones a las problemáticas que impiden la escrituración.

La meta sería intervenir más de 13 mil predios en el siguiente año. La ANT recordó que los trámites son gratuitos y se adelantará con el apoyo de la URT.

Sobre ello, el director Ricardo Sabogal contó que a la par del diagnóstico que se adelanta para la devolución de predios y ayudar a las familias en su retorno, se desarrollan diferentes proyectos sostenibles que tienen como finalidad capacitar a los campesinos en cultivos de café, ganadería doble propósito y porcicultura.

Sabogal precisó que próximamente se empezará a trabajar con las familias del corregimiento Santiago Pérez en Ataco.

 

Secado de café

Por otro lado, el Ministro de Agricultura resaltó los logros de la asociatividad de la Cooperativa de Caficultores del Sur del Tolima, Cafisur, pues gracias a una unión de esfuerzos lograron reunir $18 mil millones para construir la Planta de Secado de Café del Sur del Tolima con la que se busca mejorar la calidad del café y el precio.

El alcalde de Chaparral, Humberto Buenaventura, dijo que dicha estructura sería la más grande del país y que ayudará en gran medida a los caficultores en época de invierno, pues en la actualidad les toca recurrir a un intermediario.

Mientras que el presidente de la ADR, Eduardo Gechem Sarmiento, manifestó que se “reducirá el tiempo de procesamiento, ofreciendo a su vez liquidez a productores con problemas económicos”.

En esta propuesta los estudios y diseños fueron financiados por la agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Usaid, mientras que la ADR aportó $2 mil millones, dinero con el cual se adquirirá el equipo de secado.

En total se beneficiarán 24 mil cafeteros de Chaparral, Ortega, Planadas, Ataco, Rioblanco y San Antonio.

 

‘Lluvia de anuncios’

Luego de la visita del Gobierno nacional y de la variedad de compromisos anunciados, los habitantes del Sur esperan que los recursos prometidos lleguen a su destino y no se queden por el camino, pues a un año de la firma del proceso de paz, lo único que llegan a las zonas apartadas son solo “noticias”.

Edilson Chávez, habitante de la vereda Forestal Ambeima, comentó que las mayores necesidades en donde habita son las vías, “tenemos muchas dificultades, nos toca hacer maromas para poder pasar barrancos, nos sentimos como si no fuéramos colombianos”, comentó Chávez.

El productor resaltó que su vereda es una pequeña despensa agrícola, y a pesar de que allí deben sortear diferentes situaciones para llegar al casco urbano y vender la producción, el pago es demasiado bajo.

 

De la siembra a la comercialización

Uno de los anuncios que hizo el jefe de la cartera de Agricultura es que después de la siembra de 1,2 millones de hectáreas, se emprende la estrategia Colombia vende y Colombia comercializa, la idea es mejorar esta fase comercial de los productos del campo. “Todos los campesinos saben hacer su trabajo, saben sembrar, pero no todos saben comercializar o vender y en muchas ocasiones quien más gana es el que hace la intermediación”, dijo el funcionario. El objetivo es generar un contacto directo entre el productor y el comerciante.

 

Opine

Recuerdos de un conflicto que no quieren revivir

Bernardo Aldana

 “Hace tiempo salí de mi finca debido a que habían muchos enfrentamientos”.

Luis Morales

 “Duré cuatro años desplazado, pero de ver que estaba por ahí (sin dinero) me devolvía a la finquita”.

Ismael Montes

 “Me mataron tres tíos y tres sobrinos, salí con nueve hijos. Desde ese entonces no volví a Ataco”.

Aracely Aldana

 “Daba miedo volver, pero tocaba porque qué hacíamos, estábamos enseñadas a vivir en el campo”.

 

Cifra

6 de cada 10 campesinos en el Tolima no son dueños de la tierra en la que trabajan.

Credito
XIMENA VILLALBA C.

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